Meciar convocará un referéndum sobre la independencia de Eslovaquia

El líder nacionalista VIadímir Meciar, gran triunfador de las elecciones en Eslovaquia, anunció ayer que pedirá a sus parlamentarios que bloqueen la reelección de Václav Havel como presidente de Checoslovaquia en el Parlamento federal, y confirmó su intención de declarar la soberanía de la república eslovaca "en la primera sesión parlamentaria posible". Dijo también que convocará un referéndum para que los ciudadanos decidan si optan por la independencia la federación.

Meciar, indicó que convocará dicho referéndum "a finales de este año o principios del próximo". Meciar obtuvo un 38% de los sufragios en Eslovaquia, y estuvo en paradero desconocido en las 48 horas que precedieron a su comparecencia de ayer, creando una enorme expectación en el Gobierno central de Praga entre políticos y periodistas que esperaban su sentencia. Su éxito electoral le permite ahora ser el hombre que decida sobre la formación del nuevo Gobierno federal y la reelección de Havel.Meciar, a la cabeza del Movimiento para una Eslovaquia Democrática, dijo que creará un Gobierno provisional hasta el referéndum y que luego, cuando se decidiera sobre la independencia, "se conocerían nuevas posibilidades de las futuras formas de Gobierno". Las leyes federales, sin embargo, "serán respetadas" en Eslovaquia hasta la nueva Constitución.

A la conferencia de prensa, celebrada en el restaurante del enorme edificio de arquitectura estalinista de los sindicatos, llegó el político acompañado de 18 de sus directivos y varios guardaespaldas. El ex comunista, que se dedicó al boxeo en su juventud, lo que se aprecia aún en su físico, llegó triunfante, con corbata azul, el color símbolo de Eslovaquia, con algunos minutos de demora.

Político popular

El líder nacionalista afirmó que había visitado al presidente Václav Havel por primera vez en mayo del año pasado y que le había dicho -todavía el político más popular del país, tanto en Eslovaquia como en las tierras checas- que su apoyo "dependería de su comportamiento en la campaña electoral".El presidente Havel lanzó varios mensajes públicos apelando a los electores a que mantuvieran la federación, criticando indirectamente a Meciar y a los separatistas. "Los que votan por ello deciden también sobre una nueva división europea entre el este y oeste".

Meciar dejó, sin embargo, una puerta abierta para una mínima posibilidad de Estado común con los chechos asegurando que "las negociaciones con Klaus ya se han iniciado, porque él ha sido el único político que no nos ha atacado". Declaró que de no lograrse acuerdo en las negociaciones con Klaus, a partir de 1993 habría "dos reformas económicas, una eslovaca y otra checa".

Como es habitual en Meciar, envió mensajes contrapuestos a la clase política checoslovaca, aclarando que no está dispuesto a crear una coalición con los antiguos comunistas, agrupa os ahora en el Partido de Izquierda Democrática (SDL), que obtuvo un 18% en Eslovaquia.

El líder añadió sin embargo que veía "una posibilidad de cooperación" con el Partido Nacional Eslovaco (SNS), que obtuvo un 10% de los votos y han, sido criticados por el comité de derechos humanos de Helsinki. por su postura radical contra las, minorías que viven en Eslovaquia. En Eslovaquia viven medio, millón de húngaros, alrededor de: 300 gitanos, 21.000 ucranianos, 62.000 polacos, 53.000 alemanes y 45.000 silesianos.

Mientras líderes de partidos políticos húngaros dijeron que la, elección de Meciar era "una alternativa peligrosa para las minorías", han asegurado que pedirán la "autonomía territorial". El caudillo rechazó estas reivindicaciones y dijo que la alternativa de soberanía "es válida sólo para la nación y no para las nacionalidades". Meciar aseguró también que "los líderes de los partidos húngaros no son representativos de todos los húngaros".

La ley de idiomas, confirmada el año pasado, en la que se permita a la minoría magiar utilizar su lengua en asuntos oficiales y de la Administración estatal "debe ser revisada", dijo Meciar. "Necesitamos sólo una lengua que nos una, el eslovaco".

Satisfacción

El líder no podía ocultar su ego satisfecho al ver a cientos de periodistas y cámaras de televisión apuntando a Eslovaquia, mientras un periodista comentaba: "El mundo conocerá finalmente la diferencia entre Eslovaquia, Eslovenia (ex Yugoslavia) y Eslavonia (ex Yugoslavia)".Meciar dijo qué los electores habían votado mostrando su desacuerdo hacia la reforma económica federal que ha afectado "desigualmente" a ambas repúblicas, la checa y la eslovaca. "La profundidad de la crisis es tan grave que preveemos un real colapso de la economía. Eslovaquia está en el límite de la desintegración económica", añadió en su diálogo con la prensa.

El líder nacionalista añadió que si Eslovaquia continuaba en el curso de la reforma neoliberal implementada por el ministro de. Finanzas del Gobierno central, Václav Klaus, el ganador en las tierras checas (34,8%), eso Ilevaría a una total dependencia de la economía más fuerte de los checos,".