La policía investiga en el mundo de la droga el asesinato de un ex terrorista
La policía indaga entre delincuentes comunes relacionados con el tráfico de drogas el asesinato, producido por un disparo en la cabeza -en la madrugada de ayer, en Fuengirola (Málaga)-, de Ramón Agra Alonso, ex activista de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, natural de Irún, que el pasado 1 de septiembre cumplió 28 años. Agra disfrutaba de régimen abierto en la prisión provincial de Málaga, después de acogerse en septiembre de 1987 a las medidas de reinserción del Gobierno, y fue asesinado de cuatro disparos por un individuo a cara descubierta a la entrada de un garaje.
El asesinato se produjo a las 1.20 de ayer. Agra Alonso llegó minutos antes de esa hora a la urbanización Torreblanca del Sol, en Fuengirola, y estacionó su coche, un Opel Kadett matrícula MA-9021-AN, a la entrada del garaje de un edificio. Momentos después, un individuo de 1,80 metros de estatura aproximadamente, delgado y "enfundado en un mono o ropa similar de color azul", se le acercó y realizó cuatro disparos, según relató un testigo presencial.Otro señaló que los disparos pudieron haberse hecho con silenciador por el escaso ruido que se oyó.
El 14 de diciembre de 1987, el ex activista de los Comandos Autónomos ingresó en la prisión provincial de Málaga, adonde solicitó su traslado desde la cárcel de Guadalajara alegando motivos personales. Como hacía habitualmente en los últimos tres años, Agra Alonso salía el martes a las dos de la tarde del centro de preventivos malagueño en dirección a Fuengirola, localidad distante unos 25 kilómetros, donde, según fuentes penitenciarias, regentaba un pub en el pasaje Galán, en la calle Marbella. Debía haber regresado a la cárcel a las dos de la madrugada del miércoles, 40 minutos después de ser asesinado.
Las fuentes policiales, que barajan la hipótesis de la delincuencia común en el móvil de este delito, buscan una relación con las negociaciones que mantenía la víctima para adquirir un restaurante en el centro náutico de Puerto Banús, de Marbella, y sus posibilidades para obtener financiación.
Sin embargo, la posibilidad de que el asesinato se deba a una represalia de ETA por acogerse a las medidas de reinserción no han sido del todo descartadas, y ayer efectivos policiales controlaban las salidas de autobuses urbanos. Ramón Agra cumplía una condena de 16 años y medio de cárcel por una suma de delitos en los que se incluyen el asesinato, atentado y estragos. En la primavera de 1988 accedió a mantener un contacto con este periódico, que se produjo en la propia cárcel. El ex activista de los Comandos Autónomos pospuso la cita para la semana siguiente en un bar próximo a la prisión. Agra dijo entonces haber tenido una conversación con sus abogados y se -excusó por la imposibilidad de mantener la entrevista: "Me han recomendado que ahora no es el momento oportuno de hablar y que podrían verse perjudicados otros presos", explicó, para añadir en la breve conversación que entró en la organización "muy joven, y con el paso del tiempo las cosas se ven distintas". Fuentes del Gobierno Civil indican que el joven irunés. estaba alejado de ETA. Las negociaciones para disfrutar del régimen abierto las hizo a título individual.
