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A la altura de las circunstancias

La operación de estiramiento de huesos consigue crecimientos entre 30 y 40 centímetros

Para Jesús y Daniel, dos muchachos aquejados de enanismo, la vida ha cambiado desde que se sometieron a una operación de alargamiento de huesos. "El posoperatorio es muy duro y largo, pero merece la .pena", afirman sin la menor vacilación. La técnica de elongación ósea, introducida en España por el traumatólogo catalán José María Vilarrubias, permite alcanzar crecimientos de hasta 20 centímetros por hueso, es decir, 40 en cada extremidad. Pasado el verano, el hospital La Paz de Madrid será centro de referencia para este tipo de operaciones para toda España.

El mundo no está construido a la medida de esos bajitos que tanta ternura han inspirado en el cuento de Blancanieves y que han sido objeto de mofa en las cortes de reyes y en los espectáculos circenses. La estatura alcanzada gracias a la cirugía les impediría formar parte de los lienzos ¡e bufones de Velázquez."Antes necesitaba pedir a alguien que me ayudara a pulsar el timbre del ascensor, a marcar el número desde un teléfono público o incluso a alcanzar un vaso del armario de la cocina. Ahora estos obstáculos ya no existen para mí. Pero no sólo ha aumentado mi estatura, sino también mi autoestima. Me siento mucho mejor. conmigo mismo y ante los demás. Hago una vida como cualquier chico de mi edad y tengo novia", dice Jesús, un leonés de 20 años que estudia Económicas.

Jesús fue operado por José María Vilarrubias en el Instituto Dexeus de Barcelona hace casi cinco años. Se sometió a un estiramiento de tibia y peroné y su pierna creció en unos meses 15 centímetros. Ahora mide 1,47 metros. "Podría operarme el fémur", advierte, "y aumentar 15 o 20 centímetros más. Pero me siento bien como estoy. Todo el proceso que sigue a la operación es muy duro, aunque sin duda vale la pena por los resultados que se consiguen".

Daniel, madrileño de 14 años, que acaba de cursar octavo de EGB, sí ha pasado por la segunda intervención. Desde los ocho años, en que fue operado de la tibia y el peroné, hasta ahora, que se ha recuperado recientemente de la intervención del fémur, ha pasado de medir 1,05 a 1,47 metros. Por su edad todavía crecerá más. "Ahora los compañeros del colegio no me miran como antes y puedo jugar mucho mejor al fútbol", afirma Daniel con entusiasmo.

La unidad de patología del crecimiento del Instituto Dexeus, creada por José María Vilarrubias hace cinco años, es la que cuenta con más operaciones de alargamientos de huesos, tanto de las extremidades inferiores como de las superiores. según las estadísticas médicas publicadas en el mundo.

Cojeras

El método desarrollado por Vilarrubias ha sido adoptado por la Universidad de Uela, de Los Ángeles (Estados Unidos). Este traumatólogo, conocido principalmente por operar a los deportistas catalanes más famosos, ha realizado más de 600 elongaciones de huesos en casos de enanismo y ha corregido más de 300 dismetrías (cojeras). El promedio de alargamiento conseguido por hueso es de 15 centímetros y en algunos casos se han alcanzado hasta 20.

Aunque con resultados menos espectaculares, las operaciones de elongación ósea (principalmente, en corrección de crecimento asimétrico) se están realizando en otros cen tros hospitalarios de España como La Paz de Madrid, la Clínica Universitaria de Navarra y el centro traumatológico Asepeyo de Coslada (Madrid).

La unidad de crecimiento de La Paz, con una trayectoria de más de 100 alargamientos óseos, será a partir de octubre el primer centro de referencia de la Seguridad Social para toda España en este tipo de operaciones. "En esta unidad abordamos todo tipo de proble mas relacionados con el crecimiento", aclara Luis Munuera, jefe del departamento de traumatología de La Paz. "Se trata, por tanto, de una unidad multidisciplinaria en la que intervienen diferentes especialistas implicados en la patología del crecimiento. Tratamos los enanismos de causa hormonal y cromosómica, como el hipofisario y el síndrome de Turnner, hasta el enanismo acondroplásico -caracterizado por extremidades cortas-, y las cojeras; casos estos dos últimos que se corrigen con la operación de alargamiento de huesos".

Según Eduardo García Cimbrelo, coordinador ortopédico de la unidad de crecimiento de La Paz, en este hospital se están corrigiendo dismetrías de hasta 12 centímetros. "La desproporción de crecimiento entre una pierna y otra", explica, "se puede producir por un defecto congénito, por traumatismos, por infecciones o por un tumor. A partir de los tres centímetros de diferencia, la operación está indicada, y no sólo por motivos estéticos y psicológicos. Es conveniente también para evitar complicaciones como desviaciones de columna o lesiones en la rodilla".

Para Luis Munuera, el alargamiento del hueso en el enanismo acondroplásico es mucho más complejo. "La intervención en sí es similar", explica, "pero el posoperatorio es más duro, ya que se pretende alcanzar más centímetros y se tratan las dos piernas. Nosotros todavía no hacemos alargarnientos de brazos.

Aunque casi todas las complicaciones que puedan surgir tienen solución y no son frecuentes las de tipo vascular y nervioso, a veces se presenta rigidez en la articulación de la rodilla a causa de la presión ejercida por el estiramiento muscular. También se debe tener en cuenta una eventual fractura de la parte del hueso que ha crecido tras la operación.

Milímetro a milímetro

Todos los especialistas coinciden en afirmar que la edad más aconsejable para un estiramiento de huesos, en el caso de enanismo acondroplástico, es la comprendida entre los 10 y los 14 años. Cuando se trata de corregir dismetrías dependerá de la causa que la haya producido. Si ésta es congénita, lo más indicado es practicar la operación a los 20 años, cuando ya ha terminado el crecimiento natural del hueso. "La técnica quirúrgica de elongación de huesos consiste en cortar en dos partes la zona dura del hueso, es decir, el anillo, respetando la médula. La escisión se realiza por la zona de mayor vitalidad del hueso, para que entre las dos partes cortadas se produzca, como en las fracturas comunes, el callo óseo, que al principio será blando, luego cartilaginoso y más tarde se endurecerá, transformándose en un nuevo trozo de hueso", explica José María Vilarrubias.

Después de practicar el corte se realizan, a través de la piel, con un bisturí muy fino, pequeñas incisiones en distintos tendones para que, al alargarse la extremidad, ellos también se alarguen.

Se emplea anestesia general y el periodo de hospitalización oscila entre 24 horas a tres días. Durante la intervención se coloca en la extremidad operada un aparado fijador externo, mediante el cual se controlará, milímetro a milímetro, todo el proceso de estiramiento del hueso. Los fijadores mas comunes son el Illizarow y el Wagner.

"Aquí comienza el posoperatorio, donde es fundamental la colaboración de la familia", asegura Luis Munuera. "El paciente debe permanecer semanas o meses con el aparato, según los centímetros que se deseen conseguir, y necesita siempre la ayuda de otras personas, tanto para desenvolverse como para realizar las curas, que se deben hacer diariamente.

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