Siete inspectores de policía inician investigaciones
Siete funcionarios de Policía, al mando del inspector de primera José Antonio Vidal, han iniciado una investigación sobre los negocios de Juan Guerra, hermano del vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, según informaron a este periódico fuentes judiciales. El inspector Vidal es el responsable del Grupo de Policía Judicial adscrito a la Audiencia Provincial de Sevilla.La orden de investigación ha partido del fiscal-jefe de la Audiencia, Alfredo Flores. El fiscal-jefe de la Audiencia de Cádiz, Jaime Ollero, ha anunciado otra investigación.
El fiscal-jefe de Sevilla considera "secretas" las diligencias iniciadas, para evitar la presión externa sobre la investigación. Uno de los puntos más importantes de la misma se refiere a la situación fiscal de Juan Guerra, dado que existen indicios de que no ha realizado correctamente las declaraciones del impuesto sobre la renta.
El fiscal dijo ayer que las investigaciones "previsiblemente serán lentas, porque tenemos que intentar averiguar los aspectos mercantiles de la actuación de Juan Guerra". Esta postura contrasta con la que el mismo fiscal expresaba la semana pasada, cuando pensaba, más bien, en unas diligencias informativas que podían resolverse en una semana de tiempo.
Mientras tanto, numerosos periodistas aguardaron ayer, sin resultado, la comparecencia de Juan Guerra en la sede regional del PSOE de Andalucía, que había sido sugerida por dirigentes de este partido.
Tensión política
El escándalo protagonizado por Juan Guerra se ha producido en el momento crucial en que el PSOE tenía que optar entre el actual presidente de la Junta de Andalucía, José Rodríguez de la Borbolla, y el guerrista Leocadio Marín, como candidatos a la presidencia de la Junta para la próxima legislatura andaluza.Un ejemplo son las declaraciones emanadas ayer de la Junta de Andalucía, que se creyó obligada a salir al paso de los comentarios de un hijo de Juan Guerra, publicados en este periódico. El muchacho había dicho que José Rodríguez de la Borbolla "estaba detrás" de lo que le sucedía a su padre. Y el portavoz de la Junta afirmó: "Son unas declaraciones que se evidencian y descalifican por sí mismas", y añadió que eran "la reacción lógica de un hijo en defensa de su padre".
A estas alturas, la dirección del PSOE está casi convencida de que José Rodríguez de la Borbolla no es el inductor de la operación de acoso a Juan Guerra, que ellos consideran dirigida contra el vicepresidente del Gobierno. Rodríguez de la Borbolla ofreció la colaboración de su silencio a los dirigentes actuales del partido, durante la última reunión de la ejecutiva regional del PSOE. Pero algunos no se fían.
