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En libertad, con una multa, los cazadores furtivos de osos pardos y otras especies protegidas en Asturias

Los dos presuntos cazadores furtivos detenidos el pasado día 12 en Asturias como partícipes en una matanza de osos pardos y otras especies protegidas fueron puestos en libertad, previo pago de una fianza de 250.000 pesetas cada uno. José Menéndez Llanas, de 45 años de edad, y José Manuel López Galán, de 26, mineros de profesión, fueron detenidos por la Guardia Civil de Cangas del Narcea como presuntos autores de la muerte de una osa, cuyos dos oseznos habían sido entregados con vida por una persona anónima al Fondo Asturiano para la Protección de los Animales Salvajes.

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Los dos detenidos, que niegan los cargos que se les imputan, permanecieron recluidos en los calabozos de Cangas en situación de prisión provisional hasta su puesta en libertad, en la tarde de anteayer martes. El auto de prisión fue dictado por el juez de instrucción de la localidad dos días después de la detención de los dos presuntos furtivos como medida excepcional, atendiendo a la trascendencia social que han tenido los hechos delictivos de los que se les acusa.Los dos cazadores serán juzgados en septiembre, acusados de haber dado muerte en una zona cinegética especial (el parque natural de Somiedo y la reserva de Degaña) a especies protegidas y en extinción.

El director de la Agencia de Medio Ambiente del Gobierno de Asturias, Antonio Suárez, afirmó que esperaba que el juez aplique la ley de Caza, el Código Penal y la ley de Enjuiciamiento Criminal en este caso, para que a los implicados les caigan las penas máximas. Suárez recordó que el Gobierno de Asturias ha pedido al Gobierno español la revisión de las penas que contempla la actual ley de Caza, y que se tipifique como un tipo penal específico la muerte, comercio o tráfico de especies en peligro de extinción. La pena prevista por la ley de Caza para este delito es la de arresto mayor de un mes y un día a seis meses o, en su caso, multa de 5.000 a 50.000 pesetas. No obstante, si se probara la responsabilidad penal de los acusados, éstos deberán afrontar el pago de una indemnización por responsabilidad civil de 1.500.000 pesetas por cada uno de los osos muertos, según la normativa del Gobierno asturiano actualmente en vigor.

Otras cuatro personas de Cangas del Narcea, que no fueron detenidas, podrían ser procesadas, ya que en sus domicilios fueron incautados por la Guardia Civil especies protegidas disecadas y goma-2, junto con otros artilugios de caza.

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