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El dólar cotizó a 128,5 pesetas, lo que supone su nivel máximo desde enero de 1987

El dólar alcanzó ayer su cotización máxima desde enero del año 1987 al cerrar a un cambio medio de 128,55 pesetas. La divisa norteamericana se ha apreciado 11,34 pesetas en lo que va de mes, en el transcurso de una carrera alcista que afecta a la mayoría de las divisas. Ni la actuación de los bancos centrales ni la decisión, ayer, del Banco de Japón de elevar su tasa de descuento un 0,75% han conseguido frenar la marcha del billete verde. Así, la divisa norteamericana llegó a alcanzar los 144 yenes en el mercado de Tokio, aunque al cierre quedó a 143,1.

La carrera alcista del dólar, que fue retomada el lunes a pesar de ser festivo en Nueva York y Londres, continuó ayer arrastrando la cotización de la peseta hasta un máximo histórico desde 1987. El cambio medio de la peseta frente al dólar quedó a 128,55 tras alcanzar un máximo del día cercano a las 129 pesetas y un mínimo de 128,05. La apreciación del dólar no se vió frenada por la intervención del Banco de España que, según informa Efe, vendió durante la jornada unos 170 millones de dólares.La apreciación del dólar frente a la peseta en lo que va de mes supera con creces el diferencial de tipos de interés entre estos dos países. Si se compara la rentabilidad de los bonos del Tesoro norteamericanos y las letras en España (dos activos muy líquidos) el diferencial de rentabilidad es de menos de cinco puntos, mientras que la apreciación del dólar ha sido del 9,6% sólo en lo que va de mes.

Esta revalorización de la divisa norteamericana explica los movimientos de capital a corto plazo que se han notado en los mercados de cambios españoles durante las últimas semanas. A principio de mes, y ante la expectativa de una fuerte apreciación del dólar frente al marco y el yen, los mercados de divisas experimentaron una fuerte entrada de capitales que tomaba la inversión en activos españoles como paso puente hacia el dólar si éste finalmente consolidaba su carrera alcista.

Esa oleada de capitales provocó ciertas tensiones en el volumen de reservas de divisas, con una estimación de aumento, por parte del Ministerio de Economía, superior a los 2.000 millones de dólares en la primera quincena. Posteriormente, ante la consolidación de la subida y el escaso interés de las autoridades españolas por contener la depreciación de la peseta, los activos en dólares han mejorado considerablemente su atractivo. Así, en las últimas semanas se ha invertido la tendencia, con salida de dinero especulativo hacia activos denominados en dólares y menores entradas de dinero caliente.

Fuerte demanda

La fuerte demanda de dólares que hay en los mercados financieros sigue siendo el motivo de fondo de la apreciación de esta divisa. En opinión de algunos expertos, el impacto alcista ha cogido las carteras de muchos inversores institucionales con muy pocos activos en dólares, con lo que aprovechan cualquier cesión para acentuar sus compras. Esto ha anulado parte de los efectos de la intervención de los bancos centrales en contra de esta divisa.

Uno de los ejemplos de este efecto de boomerang ha quedado claro este fin de semana. La cesión que experimentó la divisa norteamericana el viernes, fue interpretada por algunos analistas como una muestra de que el dólar había tocado techo. Como apoyo a esa hipótesis quedaba el cierre de los mercados de Londres y Nueva York este lunes y el rumor, después confirmado, de una subida en la tasa de descuento japonesa. Ese cierre, sin embargo, fue utilizado para retomar la compra de dólares a un menor coste, con el apoyo de una tasa de crecimiento en EE UU superior a la prevista. El crecimiento norteamericano alejaba la posibilidad a una caída allí de tipos de interés, manteniendo la rentabilidad esperada del dólar.

Según los analistas, la única forma de frenar la escalada del billete verde es frenar su atractivo, para lo que tendrían que subir los tipos de interés en el resto de los países y bajar en Estados Unidos. Esa idea no fue confirmada ayer en Japón cuando, a pesar de la subida de su tasa de descuento, que será desde hoy del 3,25% anual, y la intervención intermitente de su banco central, se mantuvo la apreciación del billete verde. La cotización frente al marco se mantuvo por encima de los dos marcos, con una ligera apreciación.

Los rumores ahora apuntan a una subida de los tipos en Francia y la RFA (el Bundesbank se reune mañana jueves para estudiar esa medida), que podría no ser seguida por España en un intento de reducir el diferencial de tipos y de conseguir una depreciación de la peseta frente a las divisas del Sistema Monetario Europeo.

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