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Enresa proyecta un almacén de pararrayos radiactivos en un pueblo de Valladolid

La Empresa Nacional de Residuos (Enresa) proyecta instalar un almacén de pararrayos radiactivos en el pueblo vallisoletano de Bocigas, habitado por 128 personas y situado a seis kilómetros de Olmedo y a 50 de Valladolid, en una zona llana y cerealista. Los contados se han llevado hasta ahora con el máximo secreto.

Enresa necesita únicamente la licencia municipal para llevar a cabo la instalación. Según la concejala del Partido Popular (PP) Etelvina Villasanz, quien se opone al proyecto, la empresa ha ofrecido 300 millones para la localidad y 15.000 pesetas por pararrayos recogido, más la participación del pueblo en la empresa que gestionaría el almacén. Otras fuentes han señalado a EL PAÍS que la oferta es de 30 millones, 15.000 pesetas por pararrayos y un 30% de las acciones de la futura empresa. El proyecto, según versiones de asociaciones ecologistas, podría ascender a 6.700 millones de pesetas.La corporación municipal de Bocigas se halla dividida ante la propuesta. De los cuatro concejales del PP, dos, entre ellos el alcalde, Emilio García Escudero, están dispuestos a aceptar la instalación. Otros dos, las ediles Etelvina Villasanz e Irene Miranda, lo rechazan. El quinto edil de los que forman la corporación pertenece al PSOE, pero aún no ha tomado posesión, ya que sustituye a otro que dimitió recientemente. Las dos concejalas opositoras quieren que se activen los trámites para la toma de posesión, ya que el voto del socialista desequilibraría la balanza a favor del no.

Etelvina Villasanz ha señalado que las conversaciones se iniciaron hace unos 15 días. "Vinieron tres señores que dijeron ser de Enresa, nos hicieron la oferta y pidieron que mantuviéramos el secreto"; sin embargo, algún vecino del pueblo se enteró y comunicó el hecho a la Asociación de Consumidores y Usuarios de Medina de¡ Campo, que posteriormente hizo pública la noticia. Organizaciones ecologistas aseguran que no se han hecho estudios de las consecuencias sobre el medio ambiente y que "se ha intentado colar el almacén por la puerta falsa".

La oferta hecha al Ayuntamiento de Bocigas está amparada por una orden del Ministerio de Industria de 30 de diciembre de 1988 por la que se autoriza a Enresa la asignación de fondos a los ayuntamientos por la compensación por la instalación de almacenes de residuos radiactivos. La recogida de estos aparatos fue ordenada hace tres años, aunque, según entidades ecologistas, sólo se ha retirado uno de los 168 existentes.

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