El informe polémico
La avenida de la Ilustración se ha convertido en el centro de una polémica en la que la Administración no quiere entrar. Los vecinos del barrio del Pilar y los partidos de oposición vienen denunciando desde hace meses, cuando se produjo el primer hundimiento, las irregulares que rodean la construcción de la avenida.Cuando, en abril de 1988, parte de la calzada central se hundió, se supo que no se habían realizado estudios geotécnicos para conocer la consistencia del subsuelo. Fuentes del propio MOPU sostienen que hubo una petición al Ayuntamiento de Madrid para que informara sobre las condiciones del subsuelo, y que el Ayuntamiento contestó que el terreno estaba suficientemente consolidado. Diferentes técnicos sostienen que es responsabilidad del autor del proyecto, el ingeniero José Antonio Fernández Ordóñez, el haber pedido o realizado dichos estudios. El autor del proyecto aseguró, por su parte, en abril, que se estaba montando un escándalo porque él es hermano de un ministro. "Los socavones se producen en Madrid de forma imprevisible y nosotros hemos tenido mala suerte", dijo.
Los vecinos del barrio sabían que en la antigua vaguada, recubierta por miles de toneladas de escombros, subsistían vías de agua, insuficientemente canalizadas, que hacían sospechar que el terreno no tuviera solidez. Las explicaciones del MOPU, relativas a que las obras de consolidación -columnas de grava y relleno de hormigón en determinados puntos- eran suficientes y que sólo suponían un coste de unos 300 millones, no convencieron a nadie. CDS y AP exigen la revisión del proyecto y aclaraciones sobre el presupuesto adicional.
