El periódico popular británico 'The Sun' demanda a la ganadora de un bingo millonario
El periódico popular británico The Sun anunció ayer que acudirá a los tribunales para tratar de recuperar un millón de libras esterlinas (más de 200 millones de pesetas) que ganó en una competición de bingo una mujer de 74 años utilizando una tarjeta robada que contenía los números ganadores. Phyllis Hanlon, la ganadora del premio, fue absuelta por un tribunal del cargo de conspiración para defraudar al periódico.
Cuatro personas han sido declaradas culpables en un caso de robo de tarjetas de bingo producido en 1985, cuyos números eran idénticos a los que aparecían en The Sun, un periódico con una tirada superior a los cuatro millones de ejemplares diarios que pertenece al magnate Rupert Murdoch, dueño también del Times.Un impresor que trabajaba en una planta que producía las tarjetas distribuía algunas de ellas entre amigos a cambio de compartir los premios, dijeron los demandantes. Hanlon fue declarada inocente por el tribunal después de que el juez sugirió al jurado que había sido engañada. Su premio inicial con la tarjeta robada de 13.000 libras (más de 2,7 millones de pesetas) le dio derecho a participar en la Llave de oro, concurso en el que su llave abrió una caja que contenía un cheque por un millón de libras.
Recuperar el dinero
En un titular sensacionalista, el periódico anunciaba ayer: Sun demanda su premio de un millón, y declaraba que denunciaría a los ganadores ante un tribunal civil para recuperar el dinero. Hanlon dijo que había gastado la mitad de su premio en una casa nueva en Blackpool y en regalos en metálico a sus hijas y nietos por un importe de 360.000 libras (más de 75,5 millones de pesetas).[Según publicaba la Prensa británica ayer, el periódico había distribuido 25 millones de tarjetas en grupos de 1.500 lectores por todo el país, ninguna de las cuales tenía opción a ganar el premio.
Al mismo tiempo, otro impresor diferente -el implicado en el supuesto fraude- editaba unas pocas tarjetas que sí tenían opción al premio y las repartía a voleo de cuando en cuando. Una de estas tarjetas fue la que le cayó en suerte a Phyllis Hanlon, ya que consiguió abrir la caja que contenía el millón de libras.
En la Prensa diaria británica es frecuente la utilización de distintos juegos para incentivar a sus lectores.]
