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Una vacuna contra el SIDA se experimenta por primera vez en humanos en Europa

Las autoridades sanitarias del Reino Unido han autorizado la aplicación de la vacuna HGP-30 contra el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) en 24 voluntarios seropositivos o seronegativos de alto riesgo. Es la primera vez que una vacuna contra el SIDA se experimenta en humanos en Europa y la primera ocasión en que una vacuna compuesta de una proteína sintética formada por 30 aminoácidos se usa también en personas en el mundo. El propósito de este experimento es saber si la vacuna puede ser administrada o no con seguridad. Hasta ahora sólo se ha experimentado en Zaire y Estados Unidos.

La vacuna, desarrollada por un equipo de científicos norteamericanos para los laboratorios Viral Technologies de Washington, será presentada el próximo día 14 de mayo en España por el investigador norteamericano Adan Ríos miembro del equipo que la descubrió, en el marco del Segundo Congreso Internacional de Cáncer asociado al SIDA que se celebrará en Toledo los días 13 y 14 del próximo mes.La HGP-30 es una proteína p17 sintética formada por 30 aminoácidos que, según estiman los científicos, al ser inoculada dará lugar a la formación de anticuerpos frente a la proteína p17 gag del virus del SIDA. La vacuna pretende atacar directamente a la proteína estructural interna del virus del SIDA, cuya función es hasta ahora desconocida. Los especialistas creen, no obstante que éste puede ser el punto más débil en el armazón del virus del SIDA. El punto clave de la eficacia de esta vacuna es que está dirigida contra una parte del virus que permanece invariable, según fuentes médicas de los laboratorios Viral Technologies. Hasta la fecha, las vacunas utilizadas se disertaban en base a la cubierta del virus, que sufre modificaciones.

Control médico

La aplicación concreta de la vacuna a 24 personas que hayan estado en contacto con el virus y que de forma voluntaria se prestarán al experimento este verano será controlada por un equipo médico, encabezado por Brien Gazzard, jefe de la unidad de SIDA del hospital Saint Stephen de Londres, centro puntero en investigación y tratamiento de esta enfermedad. Según este médico la vacuna se aplicará en una primera fase a individuos seropositivos y más adelante a seronegativos de alto riesgo. El grupo de médicos del Reino Unido trabajará estrechamente en el seguimiento del experimento con diversas instituciones de investigación sobre el SIDA de Estados Unidos.Según las explicaciones da das por Allan L. Goldstein jefe del departamento de bioquímica en el Centro Médico de la Universidad George Washington y coinventor de la vacuna, la HGP-30 transpasa una de las mayores barreras en la lucha contra esta enfermedad al constituir con éxito una acción protectora contra el SIDA.

"Esta vacuna tiene que ser necesariamente segura puesto que la HGP-30 es una molécula sintética que contiene un virus muerto y material genético y no plantea ningún problema como posible foco de infección para la persona que se ha vacunado", ha explicado Goldstein.

Otra de las aplicaciones prometedoras es, según los científicos que la han elaborado, que resulta muy adecuada para los seropositivos que no han desarrollado otras fases posteriores del proceso del SIDA.

Para el doctor español Vicente García Villarrubia, presidente del congreso sobre cáncer asociado al SIDA que va a reunir en Toledo a cerca de 50 especialistas de todo el mundo, nos encontramos ante un gran avance que puede servir para combatir el SIDA de manera eficaz. Investigadores holandeses han demostrado recientemente que la caída súbita de los niveles de anticuerpos frente a la proteína p17 induce la aparición del SIDA en personas seropositivas. "Mantener niveles altos de anticuerpos frente a la p17 podría ser importante para la estabilización de la enfermedad y para prevenir la aparición del SIDA", mantiene Villarrubia.

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