Un recluso de Cáceres se cose la boca para pedir su libertad
José Antonio Ruiz Ruiz, recluso de la prisión de Cáceres-1, se declaró el viernes, en huelga de hambre y se cosió la boca con aguja e hilo, para no tomar alimentos sólidos, en protesta por no haber sido puesto aún en libertad, según confirmaron fuentes del citado centro penitenciario.Según estas fuentes, José Antonio Ruiz considera que ya ha cumplido la condena que le fue impuesta, y que debería haber sido puesto ya en libertad. Sin embargo, según los cómputos de la dirección de la prisión, el recluso se encuentra en un error, y no puede aún salir de la cárcel.
Ruiz -dijeron las mismas fuentes- se ha cosido la boca, dejando sólo un agujero para poder beber -según ha manifestado- café y cerveza, y para poder fumar.
El facultativo de la cárcel, Emilio Pérez, declaró que sólo pudo apreciar las lesiones producidas al coserse la boca, pero que no pudo atenderle, porque el recluso se negó.
