Reinosa
Me gustaría que el presidente del Gobierno, al que tanto le afecta la violencia de los obreros, dijera algunas palabras sobre la ocupación de Reinosa por parte de las Fuerzas de Orden Público. Pero no dirá nada, como tampoco lo dirán los señores Roldán y Barrionuevo, cubriendo así de vergüenza un partido y unas instituciones creadas para defender las libertades. Una cosa es mantener el orden y otra muy distinta comportarse como fuerzas de ocupación en un país enemigo. Cómo pueden justificar su silencio los diputados del PSOE cuando no hace muchos años dedicaron un pleno del Congreso a debatir la agresión a uno de ellos. ¿Qué dirían ahora si una de las personas maltratadas fuera un familiar de un miembro del Gobierno? Lleno de rabia y vergüenza, sólo me queda expresar mi solidaridad con el pueblo de Reinosa y ofrecer mi firma para cuantas acciones quieran emprender para evitar que estos hechos se puedan repetir.- Joan Vila Grau.
