El Banco de Espana corrige al alza las subidas de precios publicadas este año por Estadística

El Banco de España ha detectado presuntos errores en el índice de precios al consumo (IPC) publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) para enero pasado. Un amplio estudio difundido ayer por el banco emisor asegura que la subida debió ser del 0,9%, no el 0,7% dado a conocer oficialmente. Al mismo tiempo, advierte sobre el peligro de que 1987 se cierre con un incremento próximo al 6%. También apunta que el IVA encareció los precios un 2,4% el año pasado y que la inflación española sólo supera a la media de la Comunidad Europea en 2,1 puntos, diferencial que "se va a estancar".Las conclusiones del estudio, difundido ayer por el Banco de España dentro de su Boletín Económico de marzo, empiezan con esta afirmación: "Existen indicios de que el crecimiento del IPC en enero de 1987 anunciado por el INE (0,7%) es incorrecto, debido a un error en el cómputo del componente de servicios del IPC, por no haberse tenido en cuenta la subida del precio de la vivienda en propiedad, dé protección oficial, que se registró en enero. A partir de la información disponible, estimamos que el crécimiento en enero ha sido del 0,9% y no del 0,7%, como se hizo público".

El banco emisor hace a continuación una llamada a una nota a pie de página que dice: "El INE no hará pública la cifra revisada de enero hasta dentro de unos meses". Pero el director general del INE, Javier Ruiz-Castillo, declaró anoche a este periódico: "No tengo ninguna noticia de este informe del que me habla y no tengo ningún comentario que hacer". Otros altos cargos del Ministerio de Economía y Hacienda no atendieron las llamadas destinadas a aclarar el presunto error.

"Independientemente del error mencionado", dice el estudio, "la incidencia de los precios de la vivienda en el IPC parece que está sesgada a la baja. Por ejemplo, de enero de 1986 a enero de 1987, el índice de viviendas en propiedad del IPC ha subido un 3,9%, frente al 21,9% que ha subido el precio de la vivienda para el comprador. Aunque, por supuesto, lo que el IPC recoge no tiene por qué coincidir con este otro indicador, la disparidad es difícil de justificar".

El estudio del Banco de España -a cargo de los economistas de su servicio de estudios Antoni Espasa, María Cruz Manzano, María de los Llanos Matea y Víctor Catasús- estaba casi terminado de redactar cuando el INE publicó el IPC de febrero. Para ese mes, los autores predecían un 0,2%. El INE publicó el 0,4%, dato que fue saludado con satisfacción por el Ministerio de Economía, la UGT y la CEOE.

En cambio, para dicho estudio el 0,4% "supone un empeoramiento de las perspectivas de inflación que hemos enumerado", debido a que "el comportamiento aparentemente moderado del IPC total es consecuencia, básicamente, del fuerte retroceso de los precios de los alimentos no elaborados".

Predicciones

Las perspectivas enumeradas antes de conocer el dato de febrero descansaban en que, si bien el IPC global y los precios de servicios y bienes elaborados no energéticos muestran desaceleraciones subyacentes, "el crecimiento acumulado para el IPC global durante 19.87 se predice entre el 5,1 % y el 5,9%".

El que se aproxime más a un extremo u otro lo fiaba el estudio al perfil mensual con el que s logre el objetivo anual definid para las magnitudes monetarias". Y añadía: "De lo anterior se deduce que la política monetaria anunciada es compatible co el objetivo de inflación, pero necesaria para que este pueda lograrse".

Esta política, "la única a corto plazo", según declaró el pasad jueves el ministro de Economía Hacienda, Carlos Solchaga, se centra en terminar el año con un aumento del 8% en la cantida de dinero, punto y medio hacia arriba o hacia abajo. El 24 de marzo pasado, día en que aparece fechado el estudio, sólo se conocía que las citadas "magnitudes monetarias" habían crecido un 12,4% en los dos primero meses del año, con un perfil del 16,7% para febrero. Ayer también se difundió que el crecimierto de marzo ascendió al 17,6%.