Pilar Miró quiere como jefe de seguridad a un policía acusado de sustraer documentos
Pilar Miró, directora general de Radiotelevisión Española (RTVE), pretende nombrar al frente de la seguridad del Ente Público RTVE al inspector de policía José Luis Rodríguez Zarco, a quien se le abrió un expediente por la supuesta sustracción de documentos públicos, entre ellos informes elaborados por la Brigada de Interior sobre la trama ultra y el 23-F. Un portavoz oficial de RTVE señaló ayer que Miró había solicitado un informe sobre Zarco a José María Rodríguez Colorado, director de la Policía.
Fuentes oficiales de RTVE indicaron ayer que "Rodríguez Zarco es uno de los candidatos a ocupar la jefatura de seguridad de RTVE" e incluso señalaron a continuación que "es el candidato más firme" a dicho puesto, y que su nombramiento se realizará "cuanto antes". Según esta fuente oficial, el nombramiento del jefe de seguridad de RTVE es competencia de la directora general del Ente público, Pilar Miró.Esta fuente añadió que se está a la espera de que Interior conteste a una petición de información sobre Rodríguez Zarco. La respuesta debe venir del actual director general de la Policía, José María Rodríguez Colorado, quien aún no ha remitido su contestación a la dirección de RTVE.
El inspector Rodríguez Zarco, de confirmarse su nombramiento en RTVE, pasaría a ocupar la jefatura del servicio de seguridad, con rango de subdirección. Este portavoz oficial señaló que "la persona que finalmente sea designada" será jerárquicamente superior al actual responsable de la seguridad en RTVE, el coronel de la Guardia Civil Antonio Moyá.
Interior, a través de la Dirección General de la Policía (DGP), abrió un expediente en octubre de 1983 a José Luis Rodríguez Zarco y al comisario Sebastián Fernández Dopico, que fue archivado de modo provisional posteriormente, una vez que el juzgado de instrucción que entendió del caso decidió archivar a su vez sus diligencias previas, según informaron fuentes policiales.
El motivo del expediente se debió a la desaparición de 5.000 documentos oficiales de la Brigada de Interior, donde ambos policías estaban entonces destinados.
Fernández Dopico fue jefe de la Brigada de Interior y Rodríguez Zarco su subordinado hasta enero de 1983, cuando las nuevas autoridades socialistas de Interior cambiaron a los titulares de la cúpula policial. Fernández Dopico fue sustituido por el subcomisario Mariano Baniandrés, quien denunció a sus superiores que faltaban unos 5.000 documentos de la brigada, cuando se hizo cargo de la misma.
Tras la apertura del expediente por parte de la DGP, Dopico y su subordinado Zarco entregaron de forma voluntaria unos 2.000 expedientes, algunos de los cuales contenían información sobre la trama golpista y el 23-F. Otros de estos expedientes, un centenar aproximadamente, incluían informaciones acerca de dirigentes del PSOE y del PCE. Los documentos estuvieron alrededor de nueve meses en los domicilios particulares de estos policías. De los 3.000 restantes expedientes nunca más se supo, aunque diversos funcionarios de Interior señalaron entonces que numerosos expedientes fueron quemados en un horno del Banco de España, cuestión que fue negada por directivos de esta entidad.
Sebastián Fernández Dopico fue recientemente destituido al frente de la comisaría de Entrevías en Madrid, a los pocos días de que la Coordinadora de Barrios de la capital de España denunciara en el Congreso una serie de puestos de venta de droga y la supuesta connivencia de agentes policiales con el tráfico de estupefacientes. Dopico fue trasladado a un puesto burocrático, en concreto, a la Inspección Central de Guardia de la Policía.
José Luis Rodríguez Zarco se encuentra actualmente adscrito a la comisaría de Ventas, en Madrid. Para optar al puesto de jefe de seguridad en RTVE se vería obligado a pedir la excedencia en el Cuerpo Nacional de Policía. Este periódico intentó ayer infructuosamente contactar con el inspector Rodríguez Zarco.
