El juez Barragán, sustituto de Valle, ordena la libertad de los cinco médicos acusados de aborto
El magistrado José Luis Barragán, que sustituye al titular del Juzgado de Instrucción número 14 de Madrid, Carlos Valle, por vacaciones de éste, acordó el 24 de diciembre la puesta en libertad de los cinco médicos que se encontraban en prisión por presuntas prácticas abortivas. La decisión fue tomada a petición de los abogados de los detenidos, una vez que tuvieron acceso a las diligencias, cuyo secreto fue levantado por el juez Valle el día 20 de diciembre. Familiares y amigos esperaron desde primera hora de la tarde la puesta en libertad de los médicos; éstos abandonaron la prisión pasadas las diez de la noche del día 24.
La decisión del juez Valle de levantar el secreto de las diligencias practicadas permitió a los abogados solicitar de nuevo la libertad provisional de los cinco médicos, que se encontraban en prisión desde hace más de un mes. La petición de libertad se produjo el martes 23 de diciembre, estando el magistrado titular del juzgado de vacaciones navideñas. En su sustitución se encontraba el titular del Juzgado de Instrucción número 30 de Madrid, José Luis Barragán, que no trasladó la petición al fiscal, ya que éste también había solicitado en su momento la puesta en libertad de los médicos.Tras conocerse la decisión del juez sustituto de acordar la libertad provisional sin fianza de los cinco médicos detenidos, algunos magistrados comentaron en el edificio madrileño de los juzgados que Barragán hizo saber a Valle que pensaba resolver según su criterio sobre las peticiones de libertad solicitadas. Esta advertencia, a fin de que Valle tuviera oportunidad de incorporarse al juzgado, fue interpretada por las mismas fuentes como una muestra de respeto hacia la actitud adoptada por el juez titular.
Las mismas fuentes señalaron que el juez sustituto tiene la plenitud de la jurisdicción, porque no puede mantenerse "un criterio patrimonialista", dijeron, "de las sustituciones", especialmente en un caso como éste, en que el juez sustituto puede legítimamente optar por atender una exigencia moral y resolver en conciencia con arreglo a su propio criterio El auto dictado por José Luis Barragán razona jurídicamente la libertad provisional que decreta En el caso de la ginecóloga Paula Monmeneu señala que no hay elementos de prueba suficientes para considerar que existen indicios que aconsejan su permanencia en prisión. Según el juez, el único indicio que podría relacio narla con la muerte de Consuelo Esteban Pedriza -al parecer, tras habérsele practicado un aborto- es la declaración testifical de una persona que se encuentra en Venezuela y que no esprevisible que regrese a España para ratificar su testimonio.
Por lo que se refiere a los otros cuatro médicos -Guillermo Alfonso Sánchez Andrés, Ramón José Hernández Lorenzo, Juan Manuel Sánchez Lorenzo (del centro Dator Médica) y Eduardo Cubillo-, el juez Barragán razona que la pena que pudiera corresponderles no es en ningún caso superior a prisión menor (de seis meses a seis años)
El auto destaca que los encarcelados son profesionales de la medicina y que no se producen los requisitos exigidos para mantener en prisión provisional a quienes pudieran corresponderles penas inferiores a la de prisión menor. En concreto, señala que no consta que tengan antecedentes penales y que el aborto es un problema social que no es en sí mismo causa de alarma social, "o, en todo caso, de no mayor alarma social que la que supone la propia existencia", dice el juez, "de una legislación restrictiva, en contraste con la de los países de nuestro ámbito geográfico y sociopolítico".
Carácter extraordinario
El juez Barragán decretó la libertad provisional de los cinco médicos acusados de prácticas abortivas a la vista de estas consideraciones y de que la prisión provisional ha de tener un carácter extraordinario, así como de que constitucionalmente sólo procede cuando es necesaria para la práctica de pruebas imprescindibles o para asegurar la presencia en el juicio del acusado. La intervención de los historiales clínicos, realizada por el magistrado Valle, facilitó al juez instructor todos los elementos de prueba precisos, por lo que, a juicio de Barragán, es superflua la permanencia en prisión de los cinco médicos.
Julio Lapausa, abogado de Eduardo Cubillo, y Marisa Castro, relaciones públicas de Dator Médica, comunicaron, a última hora de la mañana, personalmente a los interesados la decisión del juez. En un primer momento, éstos reaccionaron ante la noticia con estupor, pero, tras el primer instante, Eduardo Cubillo se dirigió a su celda y recogió apresuradamente sus pertenencias creyendo que podían abandonar inmediatamente la cárcel de Carabanchel. Esto no ocurrió hasta pasadas las diez de la noche, según informa Azucena Criado.
Desde las cuatro de la tarde, familiares, amigos -como la diputada por el PCE en la Comunidad de Madrid, Carmen Ronei- y miembros de la Asociación de Planificación Familiar, la Federación de Asociaciones Pro Defensa de la Sanidad Pública y la Comisión Pro Derecho al Aborto se concentraron ante la entrada de las prisiones de Carabanchel y Yeserías (mujeres) esperando su salida.
