_
_
_
_
_

El PNV llevó a sus afiliados al funeral por el guardia asesinado

Buena parte de la población guipuzcoana de Elgóibar se sumó ayer tarde al funeral por el guardia civil retirado José Expósito Afán, vecino de esta localidad, asesinado el domingo por un comando terrorista. Poco antes de iniciarse el funeral, a las siete de la tarde, la iglesia de San Bartolomé quedó abarrotada por centenares de vecinos que secundaron así el llamamiento efectuado expresamente por la junta local del PNV. El féretro, cubierto con una bandera española sobre la que descansaba el tricornio, fue introducido a hombros de los familiares del guardia José Expósito, en medio de escenas de dolor y tensión, y ante la presencia de unidades de la Policía Nacional y de la Guardia Civil que le rindieron homenaje.

En la homilía, el sacerdote que ofició la ceremonia pidió a la población que intensifique la búsqueda de caminos de diálogo y respeto y expresó su rebeldía contra quienes "suplantando a Dios se erigen en dueños de la vida y de la muerte".Al acto asistieron igualmente el gobernador civil de Guipúzcoa, Julen Elgorriaga, el presidente de las Juntas Generales de Guipúzcoa, Xabier Aizarna, mandos policiales y militares, el alcalde de la, localidad, Lucio Beitia y otros miembros de la corporación municipal.

Lucio Beitia, militante del PNV, afirmó que José Expósito era un hombre servicial, amable, simpático y querido por el pueblo, y que el atentado ha sido un acto salvaje y criminal. "Era un vecino más, estaba plenamente integrado y su muerte ha sido una verdadera sorpresa para la gran mayoría de este pueblo", afirmó el alcalde.

Tras la ceremonia religiosa, el cuerpo de José Expósito, de 62 años, fue enterrado en el cementerio de Elgóibar, localidad en la que residió en los últimos 35 años y en la que nacieron sus cuatro hijos, todos ellos de edades comprendidas entre los 20 y los 31 años.

Espiral terrorista

Con el asesinato de José Expósito, el número de víctimas de atentados terroristas durante la pasada semana se eleva a cinco. El lunes, día 29 de julio, en Madrid, fue ametrallado y muerto el vicealmirante Fausto Escrigas Estrada, director general de Política de Defensa, en un atentado en el que su conductor, Francisco Marañón García, resultó gravemente herido. Ese mismo día, a primera hora de la noche, caía asesinado en Vitoria el subcomisario de policía Agustín Fernández Retama.El pasado viernes, en Saint Jean Pied de Port, los GAL abatían al presunto miembro de ETA Militar Juan María Otegui, y al día siguiente el artificiero de la Guardia Civil Fernando Antonio Amor Calvo perdió la vida víctima de las gravísimas heridas que le produjo el estallido de la bomba que trataba de desactivar a la puerta de un bar en la localidad alavesa de Luyando. Por otra parte, el cadáver del presunto miembro de ETA Militar Juan María Otegui será trasladado hoy a Itsaondo (Guipúzcoa) donde será homenajeado y enterrado.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Herri Batasuna y las gestoras proamnistía han convocado para mañana una huelga general en esa localidad. Según una nota hecha pública por la Mesa Nacional de HB, los restos de Juan María Otegui atravesarán la frontera española a las tres de la tarde. Posteriormente, será conducido al Ayuntamiento de Itsasondo, donde quedará instalada la capilla ardiente, por acuerdo unánime de la corporación municipal, integrada por concejales del PNV, Euskadiko Ezkerra y Herri Batasuna, coalición a la que pertenece el alcalde.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_