_
_
_
_
_

El tribunal de Pau desestima la petición de libertad para los policías presos en Francia, que acogieron abatidos la decisión

El Tribunal de Apelación de Pau desestimó ayer la solicitud de libertad provisional para los cuatro policías españoles acusados de haber agredido en Hendaya el pasado 20 de octubre a José María Larretxea, presunto dirigente de ETA-pm VIII Asamblea. Los agentes españoles estaban convencidos de su inminente liberación, y recibieron la noticia con extrañeza primero, y abatimiento, después, según manifestó Pedro de churruca, cónsul general de españa en Pau. La resolución del tribunal francés echa por tierra las esperanzas alimentadas por la defensa y proclamadas estos días por los responsables del Ministerio del Interior español.

ENVIADO ESPECIAL, Cristian Fandó y Daniell Garmendia, abogadas del presunto etarra José María Larretxea, han reconocido que tampoco ellas esperaban esta decisión, significativa, a su juicio, de la independencia del poder judicial francés. En su opinión, el tribunal de Pau ha optado por negar la libertad provisional a los cuatro funcionarios españoles interpretando que no existen garantías de que se personen voluntariamente cuando sean llamados a comparecer en el juicio, considerando que el sumario permanece abierto.Jacques Tourner, abogado de los policías, y el cónsul Pedro de Churruca recibieron la notificación del tribunal a las 11 horas de ayer, y, a continuación, la transmitieron al embajador español en París, Joan Reventós, quien no pudo evitar una expresión de disgusto, y al Ministerio del Interior.

El cónsul de España en Pau fue el encargado de comunicarles la noticia a los policías que esperaban su visita a las 12.30 horas como un anticipo de la libertad. Ante el muro desnudo que rodea la prisión de Pau, en una mañana inclemente, Pedro de Churruca manifestó que había dejado a los funcionarios españoles acongojados por la decisión del tribunal. "No lo esperaban en absoluto y no comprenden nada. Ahora el caso se presenta difícil y no se le ve un final inmediato", indicó el cónsul español, para quien la decisión del tribunal no favorece en nada las relaciones entre los Gobiernos de Madrid y París.

Estupor y disgusto

Los policías españoles respondieron parcial e indirectamente a algunas de las preguntas formuladas por EL PAÍS a través del cónsul español que les visita diariamente. De las respuestas se desprende estupor y disgusto por la decisión judicial y el convencimiento deque las autoridades españolas están haciendo todo lo posible para fórzar su liberación.Afirman que como funcionarios ellos se limitaron a cumplir unas órdenes que no contravienen la legalidad. Sobre su estancia en la prisión, señalaron que pasan el tiempo haciendo deporte, escuchando la radio, leyendo periódicos y libros de la biblioteca de la cárcel y jugando al ajedrez, a las damas y a las cartas.

La negativa del tribunal francés a conceder la libertad provisional ha sido acogida con satisfacción no disimulada en medios de los refugiados vascos. Herri Batasuna de Tolosa y asociaciones de esa, misma localidad remitieron, por otra parte, la pasada semana al fiscal de Bayona y al consulado francés en San Sebastián un escrito -rechazando la entonces considerada inminente puesta en libertad de los policías españoles, a quienes acusaba de "tener la respuesta y la clave" de la desaparición de los dos refugiados, José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala, desaparecidos hace más de un mes en Bayoría.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La abogada de José María Larretxea, Cristian Fandó, concede una gran significación al fallo del tribunal y niega que este haya sido un mero trámite de resultado previsible. "Es cierto", ha señalado, "que en la mayoría de los casos en los que se juzgan delitos graves, el Tribunal de Pau no concede normalmente la libertad provisional, pero éste era un caso muy especial y, por otra parte", ha añadido, este mismo tribunal ha concedido en muchas ocasiones la libertad provisional; por ejemplo, el más importante: el caso del mercenario Zurita, encarcelado por el juez de Bayona bajo la acusación de participar en el atentado en que murió la mujer de Etxave", refugiado vasco, que resultó herido en aquella acción.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_