Desvalijadas 200 cajas de seguridad en un banco de Marbella
A más de mil millones de pesetas podría ascender el robo perpetra do en la oficina principal del Ban co de Andalucía de Marbella (Málaga) por el procedimiento del butrón -haciendo un agujero-, por una banda que aprovechó las fechas navideñas para forzar la cámara acorazada del banco y desvalijar las doscientas cajas de seguridad de su interior, en las que se encontraban joyas, divisas y otros valores de los clientes. Debido al carácter de lo robado no se ha podido establecer aún con exactitud el importe de lo robado, que podría ascender a mil millones de pesetas. La policía estima que el trabajo ha sido realizado por grandes especialistas. El establecimiento pertenece al grupo del Banco Popular.Del robo se tuvo conocimiento ayer a primera hora de la mañana, cuando los empleados del banco acudieron a la oficina y observaron un agujero en el lateral del local, que comunica con un piso en obras, también propiedad de la entidad. Los atracadores, que serían cuatro o cinco al menos, penetraron en el banco por el piso citado que, por encontrarse en obras, no estaba ocupado.
Los atracadores entraron en el banco, situado en la Avenida Ricardo Soriano, probablemente en la Nochebuena, el viernes, y continuaron en él durante el sábado y domingo. Las fiestas les permitieron, así, realizar la operación con todo el tiempo necesario. No dejaron rastro alguno de su actuación.
La técnica utilizada revela, según las fuentes informantes, una técnica en esta clase de golpes que puede caracterizar la acción de un grupo de delincuentes internacionales. Los autores del robo penetraron en los locales del banco tras hacer un agujero o butrón, por el que accedieron a la planta principal del local, donde está instalado el sistema de proceso de datos.
Desde este punto se encaminaron a los sótanos, donde está emplazada la cámara acorazada. Para abrir esta, que está dotada de una puerta de acero y de los correspondientes sistemas de seguridad, utilizaron sopletes de acetileno.
Los autores del 'robo del siglo' actuaron con gran precisión y lograron desconectar el sofisticado sistema de seguridad
Los sopletes utilizados para forzar la cámara acorazada fueron abandonados después en el mismo lugar del robo. También los sistemas de seguridad fueron desconectados.Una vez que consiguieron entrar en el interior de la cámara, forzaron las cajas de seguridad que el banco tiene a disposición de los clientes, y que también estaban dotadas de sistemas de seguridad. Doscientas cajas fueron vaciadas por los ladrones, que trabajaron con toda tranquilidad durante casi 48 horas, antes de huir con el abundante botín, abandonando el local por el portal del edificio vecino.
Tanto la técnica empleada como la precisión en el golpe y en la desconexión del sistema de seguridad, considerado como uno de los más avanzados, parecen revelar que se trata de un robo perfectamente estudiado, con conocimiento de la distribución de los locales del banco, y llevado a cabo aprovechando la impunidad del largo puente festivo.
No hay indicios exteriores, por lo que se conoce hasta ahora, de presencia de personas sospechosas en días anteriores al robo, pero sí puede deducirse, por el número de cajas de seguridad violentada, y por los equipos de soldadura empleados, que en el golpe han debido participar varias personas, que utilizaron toda clase de medios técnicos.
La evaluación exacta de lo robado era totalmente imposible a última hora de ayer, dado que se trato de valores privados que los clientes no tienen que declarar al banco. La policía procedía anoche a tomar declaración a los clientes para tratar de establecer el valor de lo sustraido.
En cualquier caso se trataría de una cifra elevada. Ayer se barajaban cifras astronómicas, posiblemente superiores a los mil millones de pesetas. Medios bancarios resaltaron a este respecto que algunas de las cajas podrían estar alquiladas a acaudalados súbditos extranjeros residentes habitual u ocasionalmente en la Costa del Sol, especialmente en los alrededores de Marbella. Entre estos clientes podrían encontrarse árabes, belgas, alemanes y otros miembros de la más alta sociedad internacional.
Los 'robos del siglo' en España
Si, como parece, el botín del robo al banco de Nueva Andalucía asciende a mil millones de pesetas, se trataría, sin duda, del robo del siglo en España. Varios son los hechos delictivos, de diferentes características, que se disputaban hasta ahora este título, pero ninguno había rondado, ni de lejos, los mágicos nueve ceros.
Las joyerías tienen el dudoso privilegio de ser las víctimas de los robos y atracos con botines de mayor cuantía. En 360 millones de pesetas se valoró el importe de los artículos de que lograron apoderarse los atracadores de una joyería de Benidorm (Alicante) en noviembre de 1980. El 20 de julio de 1978, los asaltantes de la joyería Bagués, en Barcelona, se llevaron joyas por valor de unos trescientos millones de pesetas. A la misma cantidad ascendió el botín del robo de la joyería Montiel que tuvo lugar el 26 de febrero de 1980.
En septiembre de 1979, cuatro o cinco enmascarados atracaron la joyería Mancheño, de Elche (Alicante) y se apoderaron de joyas por un valor superior a los doscientos millones de pesetas. En abril de 1981, otros cuatro encapuchados entraron en el domicilio de un joyero de León y se llevaron lingotes de oro y joyas cuyo valor aproximado era de cien millones de pesetas.
El robo del siglo individual fue, sin duda, el que sufrió el ciudadano de un país árabe en el aeropuerto de Barcelona en junio de este mismo año. Los ladrones se llevaron un botín de doscientos millones de pesetas.
En agosto de 1980, en Torremolinos, tres individuos se apoderaron de más de 150 millones de pesetas, en valores y divisas, de un coche destinado al servicio de Correos en la Costa del Sol. Los tres empleados que iban en el vehículo -blindado, por cierto- no pudieron aguantar el calor y abrieron una de las puertas, circunstancia que supieron aprovechar los atracadores.
Los titulares periodísticos tampoco escatimaron al robo de 101 millones de pesetas de los servicios centrales de correos de Madrid el calificativo de robo del siglo. Ya que no por la cantidad, el título se justificaba por la limpieza con que se cometió el hecho y por las facilidades con que, al parecer, contaron los ladrones. Ocurrió el 30 de abril de 1979.
En establecimientos bancarios, los dos atracos con botines de mayor cuantía han sido los del Banco Herrero de Oviedo y el Banco Hispano Americano de Valencia. En el primero de los casos, ocurrido en julio de 1979, los diez atracadores -ocho hombres y dos mujeres- se apoderaron de unos 130 millones de pesetas que, muy probablemente, han servido para financiar actividades de ETA, organización terrorista que se considera estaba detrás de la operación.
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