Los trabajadores de Lemoniz seguirán cobrando sus salarios mientras dure el cierre de la central
Los consejeros de Industria y Trabajo del Gobierno autónomo vasco se entrevistaron ayer con sendas representaciones de las centrales sindicales ELA-STV, CC OO y UGT, al objeto de estudiar los aspectos laborales de la decisión, por parte de Iberduero, de paralizar las obras de la central nuclear de Lemóniz. Finalizada la reunión, los dos representantes. del Ejecutivo vasco reiteraron que dicha paralización es temporal y que los salarios de los trabajadores no se verán afectados por el cierre.
El encuentro, celebrado a iniciativa de los sindicatos, que la semana pasada se entrevistaron con el presidente y el director general de Iberduero, tenía por objeto conocer de primera mano la actitud del ejecutivo de Vitoria ante el futuro de la planta de Lemóniz, y sondear sus opiniones respecto a los cuatro puntos reivindicativos adelantados la semana pasada: fórmula conjunta para los trabajadores de todas las contratas afectadas por la suspensión; consideración jurídica del tema como suspensión temporal, y no rescisión de contrato; establecimiento de complementos al seguro de desempleo; y garantía de que el tiempo que dure la suspensión no se contabilizará a efectos de los plazos de percepción del seguro de desempleo.Los dos consejeros, Javier García Egoetxeaga (Industria) y Mario Fernández (Trabajo), reiteraron la voluntad política del Gobierno autónomo de reanudar las obras en cuanto sean superados los "obstáculos técnicos" surgidos. La contratación de los especialistas -presumiblemente extranjeros- y los reajustes técnicos imprescindibles, tanto desde el punto de vista de la seguridad como de reordenación del cuadro dirigente del proyecto de Lemóniz, son los dos objetivos en que se trabaja actualmente para superar tales "obstáculos técnicos".
El interés del Gobierno vasco de reiterar que los obstáculos para la reanudación de las obras son exclusivamente de carácter técnico contrasta con el tono general en las declaraciones de los responsables máximos de Iberduero, que hablan siempre de "continuación cuando existan condiciones para ello", sin precisar si esas condiciones exigidas implican el cese de la amenaza de ETA, o únicamente la superación de los obstáculos técnicos inmediatos.
En lo que se refiere a las reivindicaciones presentadas por los representantes sindicales, el Gobierno vasco garantiza la no contabilización del tiempo de suspensión a efectos del seguro de desempleo.
El presidente de la Confederación General de Empresarios de Vizcaya, Luis Olarra, realizó ayer unas declaciones a la agencia Europa Press, en las que sale al paso de una frase, atribuida al presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Javier Arzallus, en la que decía: "Si esa gente sólo quisiera romper Lemóniz iríamos bien, pero pretenden romperlo todo, Ayuntamiento incluido".
'Tos empresarios no podemos por menos de mostrar nuestra estupefacción y grave preocupación", señala Olarra, ante tales declaraciones efectuadas durante la inaguración del batzoki (local del PNV) de la localidad guipuzcoana de Ibarra. La Prensa regional ha recogido que, ante una pancarta con. el texto de "Lemóniz destrucción", Arzallus pronunció la frase objeto de la polémica. "Debemos insistir", añade Olarra, "en que los empresarios estamos dispuestos a superar la dificil problemática económica y laboral que aflige a nuestro pueblo. Estamos convencidos de que los problemas se van a resolver y estamos dispuestos a enfrentarnos con todas las dificultades, pero también afirmamos nuetra convicción de que ello sólo será posible desde planteamientos políticos diáfanos. No comprendemos que el preidente del partido que gobierna el País Vasco acepte la demolición de Lemóniz".
