La acusación particular en el sumario de Almería solicitará nuevas pruebas periciales
El abogado de la acusación particular en el sumario que se instruye por la muerte de tres jóvenes en Almería mientras se encontraban detenidos por la Guardia Civil, Darío Fernández, va a proponer al juez especial que instruye el caso, Angel Tortosa Pozuelo, que se llevan a cabo nuevas pruebas periciales y testificales.Entre las primeras destaca la realización de un estudio que determiné con exactitud si él depósito de gasolina del Ford Fiesta en el que viajaban los jóvenes en el momento de su muerte es capaz de albergar una cantidad, tal de combustible que hubiese podido producir el grado de carbonización que se observó en los cuerpos de Juan Mañas, Luis Montero y Luis Cobos. Esta prueba, en caso de que el juez acceda a que se lleve a cabo, podría determinar también si la inexistencia de extremidades superiores e inferiores en algunos de los cuerpos de los fallecidos se debe o no al grado de carbonización alcanzado.
EL PAIS ha podido saber que también se solicitará que se analice la temperatura que alcanzaron los hierros del coche. Un dato a tener en cuenta es que el depósito de gasolina, según ha podido saber este periódico, tiene diez impactos de bala: ocho alrededor del tapón del tanque y dos en la parte inferior.
En cuanto a la prueba testifical, podría estar relacionada con la estancia de los, tres jóvenes y varios guardias civiles en el cuartel deshabitado de Casasfuertes, del que recientemente se tomaron muestras de varias manchas de naturaleza desconocida. Para Darío Fernández, la petición de esta última prueba es «ineludible, ya que a través de ella podrá bucearse en lo sucedido en el interior del recinto, donde, para mí, está la clave de todo el suceso».
Por otra parte, Darío Fernández informará en breve a la sala de la Audiencia Provincial, y a puerta cerrada, sobre el recurso presentado por éste, y denegado por el juez especial, solicitando un careo entre los guardias civiles y los miembros del club de pesca almeriense que pasaron por el lugar de los hechos en el momento en que estaba ardiendo el coche en el que viajaban los jóvenes fallecidos. Los miembros del club de pesca han declarado, al parecer, que intentaron ayudar, pero les fue comunicado por la Guardia Civil que «los heridos ya habían sido evacuados».
Se trata de los miembros del club El Palmeral, quienes, desde el momento de conocerse el suceso, hicieron declaraciones a la Prensa en este sentido. Si bien la veracidad de las mismas ha sido reiteradas veces puesta en duda por los abogados defensores de los tres guardias civiles procesados, lo cierto es que la solicitud presentada por el abogado de la acusación privada, Darío Fernández, para que se lleve a efecto un careo entre estos testigos y los miembros de la Guardia Civil que se encontraban junto al vehículo en llamas, uno de los testimonios más valiosos para el citado letrado, ha chocado con la negativa hasta la fecha del juez instructor de la causa.
