_
_
_
_
_

La Reina y el Príncipe Asturias inauguran el colegio de la Universidad Autónoma

La reina Sofía y el príncipe Felipe inauguraron ayer el colegio nacional Príncipe de Asturias, situado en el campus de la Universidad Autónoma de Madrid, que funciona ya con 415 alumnos desde comienzos del presente curso.El príncipe Felipe descubrió una placa conmemorativa y el rector de la Universidad Autónoma, profesor Martínez Montávez, agradeció los esfuerzos de los organismos ministeriales y municipales que han hecho posible la creación de este centro, alentada personalmente por la Reina, especialmente vinculada a la Autónoma madrileña, en la que ha seguido diferentes cursos sobre humanidades.

El director del nuevo colegio subrayó la importancia de la presencia de la Reina y el Príncipe en una escuela pública, en la que se forma una población escolar muy heterogénea, y acentuó la significación del hecho de que hijos de profesores, alumnos y personal no docente de la universidad, junto con muchachos que proceden de los pueblos cercanos, convivan en una institución cuyo objetivo fundamental es la «educación en libertad y para la libertad».

Por su parte, el ministro de Educación y Ciencia, Juan Antonio Ortega, celebró que fuese este su primer acto público al frente del departamento, tras haberse reunificado en él la responsabilidad de los distintos niveles de la enseñanza, y puso de manifiesto el carácter simbólico de la inauguración de una escuela de EGB integrada y relacionada con una universidad.

La Reina y las restantes autoridades recorrieron después todas las aulas del centro. Cada una de ellas proporcionó la correspondiente anécdota. «Hola, Reina», fue el saludo de un alumno de preescolar, a quien doña Sofía sorprendió dando cuenta de su almuerzo, mientras otra pequeña le entregaba un ingenuo ramillete de flores silvestres, que Su Majestad mantuvo en su mano hasta el final de la visita.

En la clase de cuarto, los escolares realizaban trabajos manuales y uno de ellos, tras saludar al Príncipe, le dijo: «Mira: todas estas cosas las hacemos nosotros, ¿sabes? Si quieres una, cógela». El Príncipe se quedó con un gatito hecho con tachuelas doradas.

En varias aulas se repitió la escena del alumno metido a reportero gráfico, y en todos los casos la Reina, visiblemente divertida, posó para los improvisados fotógrafos, a quienes, en ocasiones, tuvo que ayudar personalmente para que la máquina funcionase de una vez. Raúl, un alumno de tercero, tuvo enormes problemas con el flash de su cámara, y doña Sofía acudió una y otra vez a su mesa para auxiliarle. Finalmente, la máquina funcionó y la Reina aplaudió al impasible y voluntarioso fotógrafo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El único gesto político de la jornada lo protagonizó un alumno de sexto, que emocionó a la Reina y a todos los presentes con un ingenuo y brevísimo discurso: «Aprovechamos vuestra presencia aquí, para agradeceros lo que habéis hecho por España y por todos nosotros hace unos días».

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_