A las cinco de la madrugada, los GEO no estaban preparados para intervenir
A las 4.45 horas, en una sala habilitada dentro del hotel Palace para conferencias de Prensa, ha comparecido el comandante David Cervera, jefe del Estado Mayor de la circunscripción de Madrid de la Policía Nacional, ante un centenar de periodistas. En sus respuestas se mostró elusivo. Contestó que el mando de la operación para el rescate de los diputados y del Gobierno lo tienen los subsecretarios, que han recibido del Rey el encargo de asegurar la gobernación del país.No pudo precisar si son o no ciertos los rumores según los cuales las fuerzas de la Policía Militar que entraron en el patio que separa el edificio histórico del Congreso del que ha sido añadido posteriormente, se han sumado a los sediciosos.
En respuesta a otro periodista precisó que las fuerzas especiales de la Policía Nacional, los GEO (Grupo Especial de Operaciones), no están por el momento concentrados en las inmediaciones y en disposición de intervenir. Tampoco pudo confirmar si algunos guardias civiles inicialmente adictos al grupo de Tejero habían abandonado su posición.
Respecto a la conveniencia de que sea la Guardia Civil quien se ocupe por el momento de reducir la resistencia que ofrecen sus compañeros a las órdenes de Tejero, el comandante Cervera ha afirmado que probablemente sea más interesante y más efectivo que sea la Guardia Civil la que intente convencerles para que depongan su actitud.
Por lo que se refiere a la presencia de unidades militares en las instalaciones de Prado del Rey, donde tienen su sede Radio Nacional y Televisión Española, afirmó que eran la consecuencia de la puesta en marcha para situaciones de emergencia, prevista bajo el nombre de operación Diana.
No pudo precisar si el teniente coronel Tejero había sido informado del contenido del mensaje del Rey. Sí aseguró que él personalmente, con servicios auxiliares de megafonía, había dado a conocer la posición del general Milans del Bosch, abandonando su inicial actitud y replegando las unidades a sus órdenes a los cuarteles. Al inquirirle sobre la actitud mostrada al conocer este mensaje, señaló que al vestir circunstancialmente de paisano desde el otro lado le replicaron llamándole pelota.
El comandante Cervera afirmó que el teniente coronel Tejero se había puesto posteriormente en contacto con Valencia mediante el teléfono, para confirmar la exactitud de esa información.
El Jefe del Estado Mayor de la Policía Nacional no supo contestar quién es el paisano que asume funciones de primer orden, incluso por encima en autoridad del propio teniente coronel Tejero, en el interior del palacio del Congreso.
Tampoco pudo justificar o dar razón de la ausencia del capitán general de Madrid, Guillermo Quintana Lacaci, en todos estos momentos.
Por otra parte, el militante centrista César Menéndez Roces, profesor y periodista, logró permanecer en el interior del Congreso hasta las 3.40 horas, en que fue expulsado del edificio. Según su testimonio, «Suárez está en una sala, sólo, vigilado por cinco guardias civiles».
«En otra sala se encuentra Gutiérrez Mellado, acompañado de Felipe González, Alfonso Guerra y Santiago Carrillo. Gutiérrez Mellado pidió un abrigo, que a través de un ujier le facilitó el diputado Emilio Attard. El presidente Suárez pidió un café, que le sirvió Carmen González Páramo, miembro de UCD, una de las pocas personas no parlamentarias que todavía permanecen en el interior».
Asimismo, manifestó que Landelino Lavilla, presidente de la Cámara, permanecía sentado en la mesa presidencial, con toda la Mesa del Congreso, vigilados por siete guardias civiles. La centralita del Congreso está controlada asimismo por miembros de la Guardia Civil
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