Primeras experiencias de manipulación genética en seres humanos
Un especialista americano en trastornos sanguíneos, el profesor Martin J. Cline, de la Universidad de California, en Los Angeles, ha logrado por primera vez llevar a efecto manipulaciones genéticas en seres humanos, aunque la universidad le ha negado el empleo de los laboratorios para este tipo de experiencia, según se describe en el diario norteamericano Los Angeles Times, en información recogida por la agencia France Presse.
Las prácticas genéticas han sido desarrolladas en Israel y en Italia en dos enfermos afectados por enfermedades de la sangre incurables. Genes normales fueron insertados en las células de su médula ósea, gravemente alterada.Los resultados no son concluyentes todavía. El primer enfermo es una mujer de veintiún años a la que le fue practicada la intervención en un hospital de Jerusalén. La otra persona es una joven de dieciséis años, tratada en la policlínica de Nápoles. Las dos mujeres sufren una enfermedad de la sangre llamada talasemia mayor, que se encuentra frecuentemente en el Mediterráneo. Las personas afectadas por el mal son generalmente incapaces de producir hemoglobina normal.
La manipulación genética constituye una de las posibilidades futuras más esperanzadoras y temibles de la nueva biología. Cada ser vivo nace con un código genético heredado de sus antecesores. Desde cualquier planta al más genial de los seres humanos, toda entidad viviente reproduce una infinidad de características determinadas, aunque otros caracteres son objeto de desarrollo y experiencia en cada existencia individual.
La modificación de ese código genético abre posibilidades de cambio en la vida de los hombres. Graves enfermedades hereditarias podrían ser eliminadas con la modificación del código genético. También se especula con la posibilidad de que gracias a la manipulación genética sería posible desarrollar individuos vivientes con rasgos a determinar.
Cada gen determina un proceso que conduce al desarrollo de ojos de un determinado color, la aparición o desaparición de cualquier órgano o la formación de un cerebro con unas u otras características. La manipulación genética supondría el control de esos procesos.
