Madrid, "zona nacional"
No deja de ser triste e indignante que conocidos antidemócratas, aprovechando el balbuceo democrático, celebren el día de «su» patria española para expresar con total impunidad su condición fascista, injuriando a nuestra nación, a nuestra bandera, al Rey y haciendo apología (sin castigo) del terrorismo.Cualquiera puede comprobar y padecer en esas calles de Madrid (que gustosos padres ofrecen a sus hijos como «zona nacional») los gorilas de esvástica al hombro, mezclada con la bandera española y el curioso eslogan de Dios, entre correajes militares, porras, cadenas, navajas y, en más de una ocasión, visibles armas de fuego. Cualquiera pudo comprobar que estos angelitos también engrosaban la celebración del día de «su» finca como patria.
En este país (que, según los cálculos de Blas, debe tener una población superior a los 110 millones y, por tanto, la manifestación en Madrid del Primero de Mayo una asistencia de más de nueve millones de madrileños) todos tenemos la obligación de respetar su esencia, de trabajar por su fortaleza, de defender y velar por su Constitución... Pero acaso. ante los hechos mencionados, ¿no debemos exigir todo ello primero a los que tienen los medios y a los que. al parecer, celosamente la han elaborado, la han Prado?
Muchos empezamos a creer que éstos no pasan nunca por la calle de Goya y su «zona», desde donde parten libres manifestaciones pidiendo de nuevo la división de España.
