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Reportaje:Diez años de coloquios de Pau / 1

Aumenta el interés de los jóvenes historiadores por la España contemporánea

En 1970 se inició el primer coloquio como una reunión entre amigos-historiadores e investigadores -agrupados en torno a Tuñón de Lara- a quienes les interesaba la historia contemporánea de España, cuyo estudio no podían desarrollar en este país. Al último coloquio, que llevaba por título Balance de diez años de coloquios y de historiografía española, han asistido cerca de doscientos profesores y estudiantes.Desde aquellos años setenta, en los que todavía investigar sobre los siglos XIX y XX era un delito, y venir a los coloquios de Pau una aventura arriesgada para los españoles, hasta este último coloquio las circunstancias han cambiado hasta tal punto que es ahora el cónsul de España en Pau quien ha presidido la apertura de esta última reunión científica, en representación del Gobierno.

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Renovación de los estudios de historia

En el transcurso de las últimas jornadas se hicieron constantes referencias a las consecuencias que han tenido éstas en la conciencia de los jóvenes historiadores. Para el historiador Pierre Vilar, destacado hispanista, profesor de la Universidad de la Sorbona y autor de varias obras sobre historia contemporánea de España, «es alentador el entusiasmo de los jóvenes españoles por la historia, sobre todo en estos tiempos en los que parece que el estudio de la historia está en crisis».

El profesor Pierre Vilar, que presidió las sesiones de la primera jornada de los coloquios, piensa que el estudio de la historia está en crisis, principalmente en Francia («la historia se ha acabado en Francia», ha llegado a decir), por la invasión de la sociología y la psicología en todos los terrenos de la vida y de la ciencia y en parte por la acción del pensamiento de los nuevos filósofos que han abandonado la historia por la historia misma.

«En España -añade el profesor Vilar- se mantiene, y en parte, creo yo, gracias a los coloquios de Pau, lo que todos los historiadores hemos soñado: el entendimiento de la historia como explicación de la vida, la historia como algo pensable, con sentido en sí misma.»

Para el profesor Alberto Gil Novales, de la Universidad Autónoma de Barcelona, que presentó la ponencia El primer tercio del siglo XIX, los coloquios de Pau han ayudado también a hacer surgir nuevos investigadores, pero «fundamentalmente han servido para la libre expresión de la historia de la España de los siglos XIX y XX y para la renovación de ciertos métodos de estudio de la historia».

«Han desaparecido la censura y otras molestias externas respecto al estudio de la historia -añade el profesor Gil Novales-, pero al no haber sido transformadas las estructuras de poder es difícil avanzar en la investigación de la historia, porque hacen falta más centros universitarios, más publicaciones científicas, más medios de investigación y otras medidas que pongan remedio, por ejemplo, a la crisis editorial que tanto está retrasando la divulgación de los trabajados de investigación histórica.»

Dimensiones de la guerra civil

Entre el resto de las ponencias, diecisiete en total y una decena de comunicaciones, revisten especial interés las del profesor Ángel Viñas, de la Universidad de Madrid, sobre la Dimensión económica internacional de la guerra española, en la que ha hecho públicas sus últimas investigaciones, con las consecuencias que este problema ha tenido para la posguerra. Despertó también un gran interés la ponencia del profesor inglés Michael Alpert, autor del libro El ejército republicano en la guerra civil, sobre historiografía militar de la guerra civil en España.

Otros temas debatidos, relacionados con la historia del siglo XIX y XX, fueron el económico (Gabriel Tortella, Universidad de Valencia), la historiografía política sobre la guerra civil (María del Carmen García Nieto, Universidad de Madrid), movimientos obreros (Manuel Tuñón de Lara), revolución búrguesa (Juan Sisinio Pérez-Garzón, CSIC), lingüística e historia contemporánea (Miguel A. Rebollo), Segunda República (Santos Julia), historia de la Iglesia (Femando García de Cortázar, Deusto) e historia de la literatura e ideología (Mainer, Barcelona).

La cuestión histórica regional y local fue expuesta por los profesores Eloy Fernández Clemente y Carlos Forcadell (Zaragoza), sobre «Historia regional y local: estado de la cuestión»; Alberto Balcells («Historia de Catalunya»), Juan García Lombardero («Historia de Galicia») y José Extramiana («Historia de Euskadi»).

Durante las sesiones se presentaron también avances y comunicaciones de tesis sobre materias históricas en curso y los primeros resultados de una encuesta sobre enseñanza de la historia en España, así como un proyecto de estudio de las relaciones hispano-francesas, incluidas las connotaciones del ferrocarril de Canfranc y su posible nueva puesta en funcionamiento.

Nueva orientación del Centro

A partir de ahora, el Centro de Investigaciones Hispánicas de Pau, se transforma en un centro-sucursal dedicado al estudio de la historia contemporánea de España de la Casa de los Países Ibéricos de la Universidad de Burdeos, centro que reagrupa a tres universidades de la región de Aquitania, y que se encargará básicamente del estudio de todas las materias que conciernen a España, Portugal y de las relaciones de estos dos países con Latinoamérica.

«Dada la tradición y desarrollo de los estudios hispánicos en Francia -explicó a EL PAÍS Joseph Pérez, presidente de la Universidad de Burdeos y director de la Casa de los Países Ibéricos- y más concretamente en Pau por su proximidad con España y sobre todo porque aquí contamos con la garantía suficiente del magisterio del profesor Tuñón de Lara, en lo que a historia se refiere. Pretendemos instalar en Pau un gran centro de documentación e investigación histórica que estará conectado con otros centros de investigación sobre distintas materias hispánicas instalados en la regíón. La idea central de este proyecto, que depende del plan nacional de investigación francés, es formar un grupo coherente de investigadores y especialistas en todos los campos sobre los temas relacionados con España y Portugal.»

Estos centros van a funcionar en coordinación con los medios administrativos e intelectuales de los países hispánicos. «La existencia de un centro de este tipo -dice Joseph Pérez- tiene que acarrear necesariamente una colaboración estrecha con los medios universitarios y científícos españoles. De hecho ya existe esta colaboración. Contamos con la realidad española y con el futuro de programas comunes que se debatirán en próximos congresos y coloquios.»

«Estas relaciones -concluye Joseph Pérez- se realizan en un nivel de total igualdad entre los países. Nosotros vamos a aprender de España de la misma manera que los españoles pueden aprender de Francia. No existen Pirineos intelectuales. Los coloquios organizados por el profesor Tuñón de Lara son la mejor prueba de esta afirmación. Aquí se han reunido investigadores franceses y españoles de reconocida categoría intelectual.»

Una de las primeras actividades de este nuevo centro de Pau será la celebración de un congreso en otoño próximo sobre metodología de la historia de la prensa.

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