"Estoy emocionada, como loca"
«Estoy emocionada, como loca. He esperado este momento con ilusión durante cuarenta años. He deseado llegar a Vizcaya con toda mi alma durante todo este tiempo, declaró ayer a EL PAIS Dolores Ibárruri cuando a bordo de un 131 furgoneta abandonaba el aeropuerto de Sondica de Bilbao, a donde llegó para intervenir hoy junto a Carrillo en un mitin organizado por el PC de Euskadi.La presidenta del PC de España -que había salido de Madrid-Barajas a las once y cuarto de la mañana, llegó a la capital vizcaína a las doce menos diez en un avión de vuelo regular. Una hora antes se había montado un complejo, pero discreto, servicio policial en el aeropuerto bilbaíno. Junto. a policías de paisano, dos jeeps de miembros de la Policía Armada se habían situado junto a la pista de aterrizaje. Media docena de jóvenes militantes del partido -servicio de orden interno- esperaban también junto al secretario de Euskadi, Ramón Ormazábal.
A las doce menos dos minutos se abrió la puerta del avión. Tras saludar a la tripulación, Dolores Ibárruri descendió por la escalerilla del avión acompañada por su secretaria Irene Falcón y el responsable de su seguridad. Rápidamente sería rodeada por una docena de miembros de la Policía Armada que crearon un cerco en torno a ella sin causar, no obstante, problemas a la labor de los reporteros gráficos.
Casi al borde de la pista se produjo el emocionado encuentro entre Dolores, Ibárruri y el matrimonio Ormazábal. Inmediatamente la presidenta del PC fue introducida en un coche en el que montarían el secretario general del partido en Euskadi, Irene Falcón y dos miembros del servicio de orden. Antes de partir, concedería a nuestro periódico un breve diálogo a través de la ventanilla del coche. «El viaje ha sido muy bueno, pero estoy muy cansada. Siendo una alegría enorme de estar otra vez en Euskadi, mi tierra. Ahora lo que quiero es ir a Gallarta -colocándose la mano en el pecho ¡nadie sabe cuanto he esperado este momento! »
Preguntada acerca de lo que hará en aquella zona, Dolores Ibárruri -que presentaba un semblante sonriente y emocionado- señaló: «Voy a dar muchos abrazos a la gente más querida que allí queda. Me hace mucha ilusión ver cómo ha evolucionado aquella zona minera, cuna del comunismo, que estaba deprimida cuando yo la dejé», La pregunta acerca de su opinión sobre la situación en el País Vasco y la amnistía -cuando ya arrancaba el coche- fue contestada por una amplia sonrisa.
Momentos antes de la llegada del avión, Ramón Ormazábal había comentado a los periodistas que Dolores Ibárruri permanecería en Bilbao hasta el martes próximo por la tarde o el miércoles por la mañanaen que viajaría a Asturias.
A las dos y cinco del mediodía el coche que conducía a Dolores Ibárruri -seguido por dos vehículos más- salió del aeropuerto de Bilbao con rumbo desconocido. Se sabe que ayer Dolores Ibárruri almorzó en el domicilio de Ramón Ormazábal y se piensa que, pese a las apreciaciones del secretario general del partido, es probable que por la tarde pudiera haber paseado por la zona de Gallarta sin la presencia de curiosos ni periodistas. El lugar de residencia de la presidenta del Partido Comunista de España, en Bilbao, permanece en secreto.
Hoy, tras su intervención junto a Carrillo en un mitin organizado por el PC de Euskadi, al que se prevé asistirán más de 20.000 personas, se celebrará una rueda de prensa con ambos líderes del PC como protagonistas.
