La Falange disidente celebró el aniversario por su cuenta
Grupos de la Coordinadora Nacional-Sindicalista y de Falange Independiente -que forman la tercera fuerza falangista- se manifestaron a las ocho de la tarde de ayer frente al teatro de la Comedia, donde José Antonio pronunció su discurso fundacional. Ante unas doscientas personas concentradas, uno de los participantes dirigió unas breves palabras, que terminó afirmando que «esta mañana han vuelto a asesinar a José Antonio»
Después se cantó el Cara al Sol y los congregados se dirigieron hacia el palacio de las Cortes, a lo, largo de la Carrera de San Jerónimo, sin que en ningún momento interviniera la fuerza pública concentrada en los alrededores. Mientras marchaban, se dieron gritos tales como Falange, si; Movimiento, no. Viva la república nacional-sindicalista.Junto a la sede de la Cámara, de espaldas al edificio, los manifestantes volvieron a cantar el himno falangista y, tras ello, se dirigieron por el paseo del Prado, plaza de la Cibeles y calle de Alcalá hasta la sede de Secretaría General del Movimiento, frente a la cual cantaron de nuevo su himno, brazo en alto siempre. Después se volvieron frente al edificio oficial -habían estado de espaldas al mismo- y gritaron traidores, traidores, señalando con la mano' a la sede del Movimiento. Después de ello se disolvieron pacíficamente.
Por otra parte, dos jóvenes hedillistas fueron detenidos en la madrugada de ayer cuando intentaban colocar dos pancartas y una bandera roja y negra en lo alto de la madrileña puerta de Alcalá. Se trata de Emilio Castillejos, de diecinueve años, y Pedro Tamarro, de veintiuno, quienes, aprovechando su experiencia como escaladores, consiguieron llegar a lo alto del monumento y comenzaron a colocar las pancartas.
En una de ellas se hacía un llamamiento en favor de la Falange Auténtica, nombre del grupo de tendencia hedillista -opuesta a la reconocida oficialmente-, que en su día reivindicó el nombre FE de las JON S. La otra pancarta atacaba a Raimundo Fernández-Cuesta, líder del grupo reconocido.
Advertida su presencia, fueron avisados los bomberos quienes, tras un breve diálogo con los escaladores, consiguieron hacerles descender. Una vez abajo fueron detenidos por los efectivos de policía que rodeaban el monumento y trasladados a la Dirección General de Seguridad.
Por otra parte, ayer aparecieron en Madrid gran cantidad de panfletos en los que este mismo grupo denuncia la situación dejada por el Régimen de Franco, heredero de seculares injusticias. La hoja ataca también a la Monarquía, a la que califica de antinacional e impuesta por una decisión personalísima.
