Nostalgia de más clubes
Faltan Clubes de aforo medio —los más escasos en la capital— porque no tienen viabilidad económica con la normativa actual.
Seamos sinceros. Nada en la noche de la capital ha cambiado, por lo menos de momento, tras el ascenso de Ahora Madrid a la alcaldía. Aunque las palabras de Manuela Carmena, unos días antes de las elecciones, pudieran hacer pensar otra cosa: “A mí me gusta potenciar la idea de que en Madrid, el día se acaba tarde. Además, los jóvenes son tan madrileños como los mayores y tienen derecho a disfrutar”.
Las leyes contra el ruido en la zona de protección acústica especial (ZPAE) frena la expansión de los locales en el centro de la ciudad. Faltan Clubes de aforo medio —los más escasos en la capital— porque no tienen viabilidad económica con la normativa actual. No parece que el ayuntamiento piense incentivar este tipo de ocio.
Por eso mismo es digna de aplauso la labor de clubes como Stardust, que aún sigue programando buena música todos los viernes. Apostando por el techno de artistas que se encuentran, casi siempre, en los bordes del sistema. Grandes nombres del underground que intentan dar un poco de brillo al género más popular de la electrónica.
Por la sala Cool estos últimos meses han pasado figuras como Hardfloor, Phase, Function, Paula Temple, Mike Dehnert o Svreca, este último desde su posición de estrella local con un reconocido prestigio en el extranjero.
Lo cual dice mucho del enorme trabajo de comisariado que está realizando Alex Guerra, entre otros. Esta semana es Ansome quien se ocupará de dar vida a la concurrida pista de baile de la discoteca. El productor inglés estará presentando en directo un adelanto del que será su primer disco, Stowaway. Techno oscuro, rocoso y sin fisuras.
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