El Gobierno amenaza a los ganaderos con sanciones de la ‘ley mordaza’
El subdelegado en Lugo ordena la retirada de los tractores que desde el 10 de diciembre cercan la Muralla Romana
La subdelegación del Gobierno en Lugo ha fijado un plazo de 48 horas, que comenzó a correr ayer lunes, para que los ganaderos que protestan desde hace semanas contra el bajo precio de la leche despejen de tractores la ronda de la Muralla Romana de Lugo y permitan la circulación en dos carriles. El subdelegado del Gobierno en funciones, Ramón Carballo, ha asegurado este martes que una vez vencido el plazo, si los promotores de la protesta no cumplen la resolución, se aplicarán las sanciones de la Ley de Seguridad Ciudadana, la denominada ley mordaza."La tendremos que aplicar entre todos", ha advertido, "primero la policía local como responsable de organizar el tráfico e informarles de que no pueden estar en ese carril y, si no cumplen, a través de la policía nacional trataremos de aplicar esas medidas”.
El subdelegado del Gobierno ha apelado a "informes de la Confederación de Empresarios de Lugo, de la Federación del Comercio y de la policía nacional" sobre un supuesto "malestar" por las movilizaciones de los ganaderos. "Visto que el plan de tráfico que se había diseñado en su día cuando se hizo la solicitud de concentración no estaba teniendo los efectos deseados, la subdelegación del Gobierno elaboró una resolución donde se limita la concentración de los tractores al perímetro interior de la muralla, respetando siempre las entradas y salidas” al centro de Lugo, ha recalcado Carballo.
Uno de los portavoces de Agromuralla, que mantiene apostados en torno a 300 tractores a los pies del monumento lucense desde el pasado 10 de diciembre en protesta por los bajos precios de la leche, ha informado de que el colectivo están pendientes de una asamblea que celebrarán esta tarde “para valorar esa propuesta de la Subdelegación”. Odón Castro afirma que las medidas pactadas en septiembre para corregir los bajos precios de la leche "siguen sin cumplirse”. “Seguimos como estábamos, perdiendo dinero; las granjas tienen problemas para seguir adelante", ha lamentado.
