Mas intenta apuntalar la secesión con su plan de agencia tributaria
El organismo de recaudación, basado en los de Australia y Suecia, primará la cooperación por encima del control
Artur Mas y el independentismo catalán se han lanzado, a dos meses para las elecciones del 27-S, a intentar dar verosimilitud al proyecto secesionista. La Generalitat dio ayer un paso en ese sentido presentando el modelo de hacienda que regiría en una hipotética Cataluña independiente. Elaborado por académicos y consultoras, el plan de Mas es basar la recaudación de impuestos en un modelo de “cooperación con el contribuyente” más que en medidas coercitivas. El objetivo es emular el modelo de agencia tributaria “sueco y australiano”, dijo el president. Para el Gobierno central es “un paso más hacia ninguna parte”.
La agencia tributaria que está diseñando la Generalitat no consta aún en ningún acuerdo de gobierno, para evitar la inmediata impugnación que presentaría el Ejecutivo central. El Tribunal Constitucional ya paralizó en junio la parte de la ley de Medidas Fiscales que daba cobertura al impulso de ese organismo. Con todo, la Generalitat ha seguido adelante argumentando que la suspensión del alto tribunal llegó cuando el trabajo ya estaba hecho.
El modelo de agencia tributaria que propone Mas tiene numerosas lagunas, pero es concreto en algunos ámbitos para reforzar la idea de que Cataluña estaría preparada para recaudar sus propios impuestos desde el primer momento de la independencia. El consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, fue claro al respecto: “Después de estos trabajos estamos mucho mejor preparados para lo que tiene que acontecer”.
El director del programa para la definición del modelo tributario catalán, Joan Iglesias, explicó este lunes que los expertos recomiendan al Gobierno catalán la creación de un servicio de gestión de ingresos formado por cuatro organismos, entre ellos una Agencia Catalana de Comercio Exterior y Aduanas. Para definir el modelo se han encargado diez estudios a escuelas de negocios, expertos y consultoras privadas. La Generalitat no informó del coste de dichos informes.
El modelo que impulsa la Generalitat pretende, pese al actual nivel de fraude, convencer al ciudadano de la bondad de pagar impuestos sin necesidad de basarse en medidas de control o represivas. Según Joan Iglesias, el actual modelo de relación entre los contribuyentes y la Agencia Tributaria Española es de “confrontación y litigiosidad” y debe cambiarse por uno inspirado en el que funciona en “Australia o Suecia”.
Incumplir la ley
De momento la Generalitat no ha entrado a definir cómo sería el nivel de carga impositiva. De hacerlo sería difícil compatibilizar lo que defiende Convergència Democràtica con las propuestas de ERC.
La actual Agencia Tributaria de Cataluña, que gestiona únicamente los tributos propios de la Generalitat, cuenta con 325 funcionarios (serán 368 a final de año). La Generalitat no aclaró ni el plazo que se fija para desplegar todo el potencial del nuevo organismo ni cómo funcionaría exactamente. El presidente Mas se limitó a argumentar que el órgano es necesario. “Sin hacienda propia no hay autogobierno de verdad y sin autogobierno no hay proyecto propio”, dijo. Con todo, insistió en que “habrá que ver qué apoyos tiene este proyecto en las urnas” en septiembre. Para la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, el plan de la Generalitat es solo “un paso más hacia ninguna parte”. El Ejecutivo no impugnará nada mientras el proyecto no esté aprobado.
Está por ver si la Generalitat está dispuesta a saltase la ley. El presidente de ERC, Oriol Junqueras, se refirió al aspecto legal en una entrevista en RNE. “Nosotros aplicaremos el principio democrático para definir y redefinir el marco legal. Los marcos legales se redefinen constantemente”, dijo. Quiso justificarlo acusando al Gobierno de hacer lo mismo: “España tiene el récord de expedientes abiertos por no cumplir directivas europeas”, aseguró.
CDC y Esquerra destituyen al director de Catalunya Ràdio
Fèlix Riera, militante de Unió Democràtica, será relevado hoy como director de Catalunya Ràdio, la emisora de la Generalitat, con los votos de Convergència y Esquerra Republicana. El Consejo de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales se reunió ayer para votar la destitución, pero se produjo un empate a tres y no se lograron los dos tercios requeridos. Hoy se volverá a repetir la votación y se impondrá el voto de calidad del presidente, Brauli Duart, nombrado a propuesta de Convergència.
El argumento oficial para la destitución de Riera es que se está produciendo un “cambio del modelo organizativo” en los medios de comunicación de la Generalitat. La realidad es que Riera (Barcelona, 1964) es víctima de la ruptura de la federación Convergència i Unió. El director de Catalunya Ràdio había sido miembro del comité de Gobierno del partido de Josep Antoni Duran Lleida hasta su nombramiento y era el único cargo de peso de la línea oficial no independentista del partido, que se había negado a dejar el cargo.
La destitución de Riera, que no irá acompañada del nombramiento de un sustituto, prospera después de que CDC y Esquerra cubriesen la semana pasada una vacante en el consejo desde hacía dos años con la periodista Rita Marzoa. Así se aseguran el control del organismo que tutela la televisión y la radio públicas catalanas en un momento político de especial trascendencia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.