La bisexualidad no es un estado transitorio
Un estudio de la Universidad de Utah demuestra que es, al menos entre las mujeres, una orientación sexual más y no un período de confusión o lesbianismo no asumido
La bisexualidad es, al menos entre las mujeres, una orientación sexual más, tan estable y tan capacitante para tener una relación estable como la heterosexualidad o la homosexualidad. Por si había dudas y acabar con los mitos (la bisexualidad como un periodo de confusión o de lesbianismo no asumido), científicos de la Universidad de Utah han seguido durante diez años la vida -devaneos incluidos- de 79 mujeres no heterosexuales que tenían entre 18 y 25 años cuando comenzó la investigación.
El estudio, que ha publicado la revista de la Asociación Estadounidense de Psicología, muestra que después de una década las voluntarias que se consideraban bisexuales seguían definiéndose como tales. Lógicamente, durante ese periodo pasaron por periodos en los que estaban más cerca de las otras orientaciones, pero la mayoría, al final, seguían pensando que eran capaces de sentirse atraídas tanto por hombres como por mujeres. Entre las lesbianas que participaron en el trabajo también se observó una gran claridad de ideas. En total, apenas el 17% tenía al final una relación heterosexual.
Ser bisexual -con su teórica ambivalencia- no impidió que la mayoría de las mujeres (más del 70% en todos los casos: lesbianas, bisexuales o sin definir) hubieran mantenido relaciones afectivas de al menos un año de duración.
Entre las que se consideraban homosexuales, un 14% había mantenido alguna relación heterosexual. "Esto prueba que la sexualidad femenina tiene un cierto grado de fluidez, y que la diferencia entre ser bisexual o lesbianas no es tan rígida", dijo la directora del trabajo, Lisa Diamond. Una prueba más de que la frase que usan muchas de ellas ("me enamoro de personas, no de sexos") es cierta.
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