Oteiza renace en la memoria de Euskadi
Un homenaje institucional y social recuerda a uno de los mayores artistas del siglo pasado en el centenario de su nacimiento como un "terremoto cultural"
Jorge Oteiza Enbil (Orio, 1908-San Sebastián, 2003), uno de los más ilustres escultores del siglo XX, vuelve a agitar la memoria colectiva al cumplirse hoy el primer centenario de su nacimiento. Su genio artístico y vital siguen dando que hablar. La figura y la obra del artista, poeta, filósofo y agitador cultural y social durante largas décadas ocupan aún el recuerdo de familiares y amigos, mientras proliferan los actos oficiales, institucionales y sociales que buscan redescubrir ahora, un siglo después de su nacimiento, toda su laberíntica trayectoria.
"Jorge siempre va a estar en nuestro pensamiento y en nuestro corazón", afirmaba ayer el escultor Ricardo Ugarte durante el gran homenaje que organizó el Gobierno vasco en el Palacio Miramar donostiarra bajo el título Cien años. Jorge Oteiza en la memoria. Familiares, amigos, artistas y autoridades participaron en una celebración que quería ser "sencilla y emotiva", como dijo el lehendakari, Juan José Ibarretxe. Los escultores Néstor Basterretxea y Ugarte recordaron sus vivencias junto al creador y loaron su trayectoria visionaria, mientras que la escritora Julia Otxoa ensalzó su faceta poética.
Basterretxe y Ugarte repasaron sus años de creación y vivencias con el autor
Julia Otxoa destacó la "gran calidad surrealista" de sus escritos
Entre el público estaban Carmen Oteiza, hermana de Jorge; dos de sus sobrinas y Begoña Eguren, la persona que veló por su salud en los últimos años de su vida, además de representantes institucionales como el diputado general de Guipúzcoa, Markel Olano, o la presidenta de las Juntas Generales, Rafaela Romero. Del ámbito de la cultura asistieron, entre otros, el presidente de Aranzadi, Jesús Altuna; el director de la Fundación Museo Jorge Oteiza, Gregorio Díaz Ereño; artistas como José Ramón Anda o el escritor y amigo personal de Oteiza Hasier Etxeberria, quien actuó como moderador.
Basterretxea despertó carcajadas cuando reconstruyó anécdotas que compartió con el artista. "No he conocido a nadie defender una idea y la contraria con la misma vehemencia", dijo, pero "los genios son así". Recordó que Itziar Carreño, esposa de Oteiza, le leía por las noches historietas de Mortadelo y Filemón "hasta dejarlo dormido", o que describía los dibujos del propio Basterretxea como "pases largos del Athletic".
En tono más hondo, Basterretxea repasó su travesía personal y artística junto a Oteiza en Buenos Aires, durante la creación de la obra en Arantzazu o en la casa-taller que compartieron en Irún. Acabó rindiendo un homenaje a su "intuición profunda" por haber logrado "iluminar una zona vacía de la historia del arte".
Para Ugarte, "Oteiza era poliédrico; era muchos personajes a la vez". Tras repasar los tiempos en que coincidió con él en la Escuela Vasca de Escultura y en el grupo Gaur, lanzó un reto a las instituciones para hacer realidad un sueño personal: instalar en los jardines de Miramar una exposición permanente con esculturas de "los artistas de primer nivel que tenemos en el país". La iniciativa, explicó, encajaría perfectamente con el proyecto de lograr que San Sebastián sea Capital Europea de la Cultura en 2016. Otxoa destacó la poesía de vanguardia y la "gran calidad surrealista" de los escritos de Oteiza, a quien relacionó con Unamuno, porque ambos compartían "una preocupación tormentosa por la identidad y por Dios".
Ibarretxe alabó el papel de agitador cultural y "provocador necesario" para que la sociedad vasca "despertara del letargo posterior a la Guerra Civil". Bajo su aspecto "asocial y tozudo", dijo el lehendakari, fue "uno de los mayores promotores sociales": "Llenó de sentido el vacío que vivíamos, proclamó el hombre nuevo, subrayó la importancia del euskera, la necesidad de conocer y labrar el alma vasca...". Para la consejera de Cultura, Miren Azkarate, "las ondas sísmicas del terremoto cultural que fue Oteiza son perfectamente detectables aún hoy".
En el recuerdo
- Congreso. La Fundación Museo Jorge Oteiza celebra en el Museo de Navarra, en Pamplona, entre hoy y el próximo viernes un congreso internacional bajo el título Oteiza y la crisis de la modernidad, que revisará y analizará el legado creativo del artista. El programa lo abrirá hoy Vincenzo Vitiello, profesor de Filosofía de la Universidad de Salerno.
- Laboratorio. El Museo Oteiza expone en su sede de Alzuza hasta el próximo 6 de enero un total de 1.600 piezas experimentales del autor guipuzcoano.
- Otros actos. San Sebastián, Orio y Zarautz han organizado otras actividades.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.