"Lo más preocupante es que se hayan desprendido partes del motor del A380"

Agustín Guzmán pilota un hermano menor del Airbus 380, el modelo inmediatamente inferior del coloso de los cielos que ha sufrido un incidente que le ogligó a aterrizar de emergencia en Singapur. El portavoz de la vocalía técnica del Sindicato Español de Pilotos, Sepla, considera "muy valiente" la decisión de la compañía Qantas de detener las operaciones de ese modelo: "Es raro y a la vez gratificante ver cómo hay una compañía que se toma la seguridad tan en serio", señala; aunque, muy diplomático, evita censurar a las aerolíneas que han decidido continuar operando con el superavión: "El caso de Qantas puede ser especial, porque este aparato acababa de llegar de mantenimiento o de ser cambiado el motor. Y al ser un motor específico en unas condiciones específicas supongo que el resto de compañías habrán decidido seguir".

Con mucha cautela, "porque la experiencia demuestra que en aviación las hipótesis que pueden parecer evidentes, no son las que más sentido tienen", Guzmán asegura que "casi al 100%" se puede descartar un sabotaje terrorista, y apunta a un dato que define como "preocupante": que haya sido "un fallo no contenido". Esto, explica, quiere decir que "normalmente cuando un motor tiene un fallo o explota total o parcialmente todos los componente deben mantenerse dentro de lo que es su carcasa, no pueden salir disparados fuera de ese habitáculo". Guzmán añade que "eso no ha sido así" en el caso del A380, y es la razón por la que Qantas está tan preocupada", porque las piezas que salen despedidas podrían dañar otras partes vitales del avión, pudiendo llegar a provocar incluso la caída del avión.

Este piloto tampoco descarta que el incidente pueda haberse debido a la absorción de un ave o a un fallo de diseño o de mantenimiento del motor. Lo que sí señala con absoluta seguridad este piloto -que asegura que no tendría reparo en ponerse hoy a los mandos de uno de estos grandes aparatos- es que el fallo se produjo en el interior de la carcasa y que se produjo un explosión que provocó la pérdida de parte de los piezas de la zona del motor.

Los pilotos, explica Guzmán, están preparados siempre, siempre para un fallo de las turbinas. "Evidentemente, éste no es un fallo normal, pero nosotros cuando volamos tenemos siempre previsto que el motor pueda fallar. En los cálculos que hacemos para despegar siempre tenemos en cuenta que nos va a fallar un motor en el momento más crítico de la operación. Siempre pensamos que no va a despegar o que vamos a tener un fallo en el motor, y eso requier mucha concentración, pero también por eso es tan seguro volar".

Los comandantes saben que los nuevos modelos que deben pilotar pueden tener algún fallo puntual. "Es relativamente normal", asegura Guzmán, quien puntualiza que "ésta es otra cosa porque se trata de un fallo más grave". También asegura que la tripulación del A380 actuó correctamente y que estos aparatos pueden navegar con solo dos de sus cuatro motores, dependiendo del peso que transporten.

Un técnico aéreo ha explicado a Europa Press que en casos de fallos en nuevos modelos, el "procedimiento habitual" es que el fabricante, en este caso Airbus, remita una nota a todas las aerolíneas clientes del aparato para que revisen el componente afectado por una incidencia. No obstante, ha precisado que dado que los A380 cuentan con escalas largas, no se prevén cancelaciones de vuelos para revisarlos, ya que se podrán aprovechar sus paros programados para analizar las aeronaves.

Fuentes del sector consultadas por este diario confirman las principales hipótesis de este piloto y matizan que no ha habido ningún daño en el fuselaje (estructura del avión) del A380, porque, de ser así, el aparato se habría caído. Las mismas fuentes señalan que la avería en el motor ha provocado el desprendimiento del carenado (carcasa) que lo recubre; que la avería puede haber sido provocada por un pájaro, por una pieza desprendida o por una herramienta olvidada en el alojamiento del motor, y que "es posible" que los técnicos de la compañía hayan realizado alguna modificación o revisión en todos los aparatos de este modelo y que por eso la aerolínea ha decidido dejarlos todos en tierra.

El secretario de la Asociación de Ingenieron Aeronauticos de Australia, Steve Purvinas, ha señalado en varios medios del país que la seguridad de la compañía Qantas se ha deteriorado "desde que ha encargado los controles de ingeniería y seguridad a países como Singapur", y que los ingenieron de Lufthansa en Alemania que realizaron el mantenimiento del A380 "no tenían ni siquiera el mismo avión en su flota". Purvinas también ha declarado que la aerolínea australiana tiene en todo el mundo 24 ingenieros , cuando "debeerían tener más de 100".

Un Airbus 380 pierde parte de un motor y del fuselaje en pleno vuelo