Comienza la cuenta atrás para Carla Bruni

Pese al mutismo del Elíseo sobre el próximo nacimiento del primer bebé presidencial, los indicios se acumulan y el tiempo corre. La semana pasada, fuentes médicas filtraron que la Clínica de la Muette, cercana a la residencia de Carla Bruni y donde tiene previsto dar a luz, tenía ya todo preparado para acoger a la primera dama. Desde ayer a las nueve de la mañana, la policía ha empezado a restringir el tráfico y prohíbe aparcar en los alrededores del centro hospitalario, situado en el elegante barrio residencia del XVIe arrondissement. En la clínica no comentan si esta medida de seguridad está relacionada o no con el esperado evento y se limitan en recordar que el centro sigue normalmente accesible para los peatones.

Eso sí, los periodistas, que hasta ayer ocupaban parte de la calle del hospital, han sido emplazados por la policía a ubicarse una manzana más lejos. Los únicos coches que pueden estacionar en esa vía son los destinados a la seguridad que, según los vecinos del barrio, ha ido en aumento desde el fin de semana. "Me hace gracia que los periodistas estéis aquí y no en la entrada de la clínica", comentó la mañana del lunes Catherine, una vecina. "Acabo de escuchar allí a dos enfermeras que comentaban que el parto sería el martes".

La cantante y ex modelo, de 43 años, aseguró en una entrevista a la prensa que salía de cuentas el día 1 de octubre, mientras que el padre del presidente, Pal Sarkozy, avanzó la fecha del día 3. El palacio presidencial asegura ahora que no es el caso hasta principios de esta misma semana, según aclaró ayer el Journal du Dimanche, habitualmente bien informado. El propio Nicolas Sarkozy pronosticó que el pequeño llegaría este fin de semana pasado."Será dentro de diez días", le confesó al cantante Charles Aznavour el pasado 28 de septiembre, cuando le visitó en el camerino tras su concierto en el Olympia, según explica hoy el diario Le Parisien.

El mismo diario se hace eco de las confidencias del mandatario durante su gira por el Cáucaso el jueves y viernes pasado. "Mi mujer hubiera venido a Bakú, pero ¡vaya sorpresa si nuestro hijo hubiera nacido aquí!", lanzó ante el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliev. La víspera, en el avión que le llevaba de camino a Armenia, el futuro papá transmitió a los periodistas su preocupación por que el niño naciera durante su gira o su visita a Berlín de ayer. "Carla está deseando que llegue", dijo. Esta semana el mandatario no tiene previsto ningún viaje al extranjero, por lo que puede quedarse tranquilo.

Ante los rumores sobre el nombre que llevará el futuro bebé, Sarkozy, por lo visto divertido con todas las especulaciones, confesó también a los reporteros que le acompañaron de gira: "Carla y yo no queremos conocer el sexo ni escoger el nombre. Será nuestro último hijo, queremos tener la sorpresa".

Sarkozy, de 56 años, es ya padre de tres hijos, fruto de sus matrimonios anteriores, y Carla de un pequeño de 10 años.

El centro médico de La Muette tiene ya reservada una habitación de tipo apartamento para la primera dama, así como tres o cuatro habitaciones individuales junto a la suya, por un precio cada una de unos 250 euros por noche, destinadas al personal de seguridad, según reveló la semana pasada una fuente hospitalaria a la radio privada Europe 1.