El divorcio ruso de Abramovich
El proceso legal se realizó en el país del multimillonario, donde las leyes son más benévolas con el reparto de sus bienes
16 años juntos son demasiados para los Abramovich. El multimillonario ruso Roman Abramovich, propietario del Chelsea y el 16º hombre más rico del mundo según Forbes, se ha divorciado en su país natal de su esposa Irina, madre de sus cinco hijos, según ha anunciado su portavoz en un comunicado. En Rusia, la ruptura le ha salido más barata que si se hubiera tramitado en Reino Unido, ya que los tribunales británicos tratan por igual a los dos cónyuges a la hora del reparto de sus bienes. Los diarios británicos apuntan a la modelo rusa Daria Zhukova como posible causa de la separación.
Abramovich, de 40 años, y su segunda esposa, una ex azafata de Aeroflot de 39 años con la que llevaba casado desde 1991, tienen cinco hijos. Hace tan sólo cinco meses, Abramovich negaba y califica de "incorrectos e hirientes" los rumores de ruptura, que ha confirmado su portavoz, John Mann. El divorcio, tramiado en Rusia, ha sido "por consenso" y la pareja se ha puesto de acuerdo en las condiciones económicas y en las garantías para el futuro de sus hijos. El comunicado asegura que el divorcio no afectará para nada a los intereses del empresario, incluido el club de fúbbol de la primera división inglesa, del que es propietario desde el 2003.
Aunque no se han dado detalles sobre el acuerdo, el hecho de que Abramovich se haya divorciado en Rusia significa, según los expertos, que el empresario, al que se calcula una fortuna de más de 16.000 millones de euros, ha salido seguramente mucho más beneficiado que si se hubiese divorciado en el Reino Unido. Así, un divorcio a la inglesa habría supuesto una mayor amenaza para sus intereses económicos, ya que los tribunales británicos tratan por igual a los dos cónyuges a la hora del reparto de sus bienes.
Una modelo más joven
La noticia del divorcio se produce después de que el diario británico The Sun informara de que Abramovich había sido visto paseando por París en compañía de la ex modelo rusa Daria Zhukova, de 25 años. Abramovich ha insistido varias veces en que él y Zhukova son sólo amigos, y sus abogados amenazaron con actuar contra quienes publicasen las fotos que se tomaron de la pareja en la capital francesa. El empresario ruso, considerado como el segundo hombre más rico del Reino Unido y el primero de Rusia, hizo su fortuna explotando activos petroleros y del sector del aluminio de su país natal.
Durante algún tiempo gozó de la protección de Boris Berezovsky, uno de los magnates rusos que se hicieron con buena parte de las riquezas del país a precios de saldo tras la caída del comunismo. Abramovich compró la participación de Berezovisky en el grupo petrolero ruso Sibneft y en la compañía aérea Aeroflot cuando Berezovsky cayó en desgracia, al enemistarse con el presidente ruso, Vladimir Putin.
En 2003 se convirtió en propietario del Chelsea por 140 millones de libras y desde entonces ha invertido otros 440 millones de libras (unos 642 millones de euros más al cambio actual) en la cancelación de las deudas del club y la compra de jugadores. Posee una casa valorada en unos 41 millones de euros en el barrio londinense de Belgravia, una mansión en el condado de West Sussex y un chalet de 15 millones de euros en St.Tropez y es propietario de tres yates de lujo, dos aviones Boeing de los modelos 737 y 767 y toda una flota de automóviles.
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