_
_
_
_
Día de la Fiesta Nacional

El veto del PP a TVE aboca a un solo debate entre Rajoy y Rubalcaba

Populares y socialistas negocian los encuentros televisados de sus candidatos

Carlos E. Cué

Si las negociaciones no se complican en el último momento, y nada parece augurarlo, habrá debate televisivo en la campaña entre Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba. Pero será en singular, uno solo. Hasta ahora, en las dos ocasiones en que los hubo, en 1993 y en 2008, fueron dos cara a cara. La primera vez, dos en las cadenas privadas, Antena 3 y Telecinco. La segunda, la más reciente, otros dos, organizados por la Academia de la Televisión y distribuidos a todas las cadenas. Todo indica que esta vez se volverá a innovar: habrá uno solo y lo organizará la Academia.

Las negociaciones no han acabado, pero sí están avanzadas. Ha habido una única reunión entre Elena Valenciano y Ana Mato, responsables de campaña del PSOE y del PP, respectivamente, pero muchas llamadas de teléfono, según coinciden fuentes de ambos partidos. La decisión final sobre el número de duelos y el organizador podría tomarse esta semana.

Rubalcaba recuerda que los cara a cara son un derecho de los ciudadanos
Rajoy dice que él no se ocupa de esos temas y le remite a Ana Mato

La negociación empezó con la propuesta de dos encuentros, previstos para los dos lunes de la campaña, como en 2008. Sin embargo, el PP puso una condición casi imposible de aceptar para el PSOE: el veto a RTVE. Los populares han desarrollado en los últimos meses una intensa campaña contra la televisión pública con constantes comunicados y ruedas de prensa. La acusan de parcialidad. Ya lo hacían incluso cuando el presidente del ente había sido elegido por un acuerdo entre Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero, como sucedió con Luis Fernández y con el también dimitido Alberto Oliart.

Los populares vetan así a RTVE por motivos políticos y además porque la Junta Electoral Central exigiría después un debate que incluyese a los demás grupos, aunque ya con los segundos de Rubalcaba y Rajoy. Los populares ofrecieron dos encuentros, uno en Antena 3 y otro en Telecinco, como en 1993. En 1996 y 2000 no hubo debates porque Aznar, entonces favorito, no quiso, y en 2004 tampoco porque Rajoy también se opuso, algo de lo que después se arrepintió, según sus propias afirmaciones. El PSOE exigía que hubiese al menos un cara a cara en la cadena pública. Ante la imposibilidad de ponerse de acuerdo en este punto, se pensó en la Academia de la Televisión. Pero a los populares tampoco les satisface del todo esta fórmula. De hecho, no quedaron nada contentos de cómo se organizaron los debates de 2008. A pesar de que hubo dos moderadores, Manuel Campo Vidal y Olga Viza, elegidos por acuerdo de ambos partidos, y que hicieron un trabajo mecánico de reparto de los tiempos y de los temas, muy diferente a lo que suelen hacer los periodistas en los duelos fuera de España, los populares también vieron muestras de parcialidad.

Llegados a este punto, el PP dijo que si tiene que ser en la Academia, y no en Telecinco y Antena 3 como ellos querían, la oferta es un solo debate. Y los socialistas parecen dispuestos aceptarla, según fuentes de los dos partidos, aunque el acuerdo aún no está cerrado. El PSOE quiere evitar que con esta excusa al final no haya ningún cara a cara, así que lo más probable es que se selle en breve este acuerdo de mínimos, a partir del cual habría que negociar todo lo demás, que tampoco es fácil.

Los cara a cara electorales en España están tan encorsetados que en los de 2008 se negoció hasta cuántos contraplanos se podían hacer de cada candidato y cuánto tiempo podían durar. Se prohibió además la presencia no solo de público, sino incluso de periodistas, que no podían acceder ni siquiera a las cercanías del plató, custodiado por guardias de seguridad como si fuera la caja de un banco.

Ayer, en la recepción en el Palacio Real, Rubalcaba señaló a los periodistas que él cree que debe haber debates porque los ciudadanos tienen derecho a ellos, mientras Rajoy, que ya ha dicho en otras ocasiones que tiene voluntad de hacer debates, dejó toda la responsabilidad en Ana Mato y dijo que él no se ocupa de ese tema, a pesar de que es obvio que la decisión final la tomará él.

Al PP, que se ve favorito, nunca le ha convencido del todo la idea del debate entre Rajoy y Rubalcaba. Sin embargo, el líder del PP ha llegado a la conclusión de que es más perjudicial no hacerlo, por la mala imagen que crea, que hacerlo. Por eso la idea de un debate les satisface. El PSOE tampoco quiere convertir el cara a cara en el eje de su campaña porque sabe que con las pésimas cifras de paro es muy difícil ganarlo con claridad. De estas dos realidades y de la negociación parece consolidarse la idea de un solo enfrentamiento, aunque no está aún cerrado.

El presidente de Asturias, Francisco Álvarez-Cascos, exdirigente del PP, conversa con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y el de la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra.
El presidente de Asturias, Francisco Álvarez-Cascos, exdirigente del PP, conversa con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y el de la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra.EMILIO NARANJO (EFE)CRISTÓBAL MANUEL
Zapatero durante el desfile militar.
Zapatero durante el desfile militar.CRISTÓBAL MANUEL

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_