Un general español dirigirá los planes de la OTAN en Afganistán

La mayoría de ellos, 27, proceden del cuartel general terrestre de la OTAN en Retamares (Madrid). Aunque los generales destinados a Kabul lo hacen por un año, el Estado Mayor de la ISAF se renueva cada seis meses.

En esta rotación, será el Mando Sur de la OTAN en Nápoles (Italia) el que aporte los 250 efectivos que forman el núcleo del Estado Mayor. Pero Nápoles ha recurrido a sus cuarteles subordinados, como los de Izmir (Turquía) y Retamares (Madrid). Este último aportará 80 militares de 16 nacionalidades, aunque los más numerosos son españoles, estadounidenses e italianos. Está previsto que los militares viajen a Kabul en dos vuelos, el 19 y el 25 de enero.

Estructura integrada

Además de los 27 procedentes de Retamares, España aportará una decena de oficiales destinados en otros cuarteles de la OTAN, por lo que la cifra final oscilará entre 35 y 40.

La contribución de Retamares al Estado Mayor de Kabul es una consecuencia indirecta de la negativa del Gobierno español a que esta responsabilidad fuese asumida por el Cuartel General de Alta Disponibilidad de Bétera (Valencia), como estaba inicialmente previsto, ya que suponía el envío de dos centenares de militares españoles.

A diferencia de Bétera, que es una aportación española a la defensa aliada, Retamares forma parte de la estructura integrada de la OTAN y se financia con los fondos comunes, por lo que en teoría España no puede negarse a que la Alianza disponga de su personal. Eso lleva al Ministerio de Defensa a considerar que no es necesaria la aprobación del Congreso para el envío a Kabul de 35 militares más, pese a que sí se votó en septiembre pasado un refuerzo de 52, en cumplimiento de la La ley Orgánica de la Defensa Nacional, de 2005.

En la actualidad, España contribuye con 742 militares a la misión en Afganistán. El grueso de los efectivos está en la base de Herat, donde hay 480, pero la mayor responsabilidad española es el PRT (Equipo de Reconstrucción Provincial) de Badghis, que cuenta con 190 militares y un grupo de cooperantes. También hay militares españoles en Kabul y Manás (Kirguizistán).

El envío de cuatro aviones no tripulados (UAV) para misiones de inteligencia exigirá aumentar el contingente en otros 40 efectivos más, entre tripulaciones y personal de mantenimiento. Los cuatro aparatos fueron entregados el pasado viernes a una delegación del Ejército de Tierra en las instalaciones de Israel Aircraft Industries (IAI), fabricante del Sercher MK, con casi tres meses de retraso. Aún falta que los aparatos sean probados en España y las tripulaciones adiestradas, por lo que difícilmente estarán operativos antes de las elecciones.

El año 2007 ha sido el más sangriento en Afganistán desde la caída del régimen talibán, en 2001, con más de 6.000 muertos y amplias zonas del país fuera del control de las autoridades. El número de bajas de la OTAN ha pasado de 192 en 2006 a más de 225, incluidos cuatro miembros del contingente español.