El Tesoro reducirá las emisiones de deuda este año para evitar pagar más

Ni el volumen de deuda pública ni los vencimientos presionan ahora al Ministerio de Economía, pero sí su coste, cada vez más elevado. La decisión anunciada ayer por su responsable, Elena Salgado, es mantener las emisiones previstas hasta final de este año, pero reducir su importe para descargar el tramo final del ejercicio. Hasta diciembre quedan cuatro emisiones, tres de bonos y una de letras, por un importe no publicado.

La evolución del déficit del Estado permite, según argumentó Salgado, no tener necesidades acuciantes de financiación. El déficit del Estado hasta octubre alcanzó el 2,96% del PIB, cuando en la misma fecha de 2009 era del 5,63%. En 2009, el déficit acabó en el 9,4% y para este año el objetivo es el 6,7%, lo que la ministra considera al alcance de la mano.

El ataque de los mercados hacia la deuda española, aún más virulento que la primavera pasada en plena crisis griega, ha encarecido el coste para el Tesoro de las últimas emisiones. Las letras a seis meses, por ejemplo, se pagaron entonces a un tipo marginal del 1,65% y en la última subasta, el pasado miércoles, en plena refriega por el rescate de Irlanda, ese porcentaje se duplicó (2,26%).

En lo que no ha tenido problemas hasta ahora el Tesoro es en la demanda. Según explicó Salgado, la media del ratio de cobertura para las subastas de bonos y obligaciones desde principios de año es de 1,95 (relación entre las peticiones y lo que se adjudica) y de 2,31 en las letras del Tesoro.

Tampoco Salgado mostró inquietud por los vencimientos de la deuda. El año que viene hay que amortizar 44.739 millones de euros y están previstas unas emisiones netas de 43.000 millones. De los vencimientos, el primer pago importante se producirá el próximo abril (15.518 millones), y después en los dos trimestres siguientes, coincidiendo con los periodos en los que hay ingresos "importantes" en las arcas del Estado, aseguró la ministra.

Añadió que la deuda pública española había demostrado "su capacidad de resistencia" en los momentos más difíciles. Y ofreció algunos datos: el peso de la deuda pública española sobre el PIB es del 62,8%, 20 puntos por debajo de la media europea, y el peso de los inversores no residentes es del 47% del total; el coste medio de la deuda en circulación se mantiene hasta el 31 de octubre en el 3,60%, mientras que el coste medio de la emisión ha pasado del 2,15% en 2009 al 2,44% este año.

El problema es que los mercados se lo crean y en ello está el Gobierno en estos días en que llueven chuzos de punta. Salgado incluyó ayer en esa ofensiva por la transparencia con la que se quiere apaciguar la fiera, la publicación mensual de la evolución de la deuda pública del Estado.