A Coruña, ciudad hipermercado

Tres macrocentros comerciales en muy pocos kilómetros cuadrados. Con la de mañana, en menos de tres años A Coruña habrá inaugurado tres grandes superficies comerciales que no distan entre sí más de cinco minutos en coche y apenas dos kilómetros a pie. Además, hay otras tres grandes superficies desperdigadas por el centro urbano, salpicado de pequeños comercios y prácticamente con un minimercado en cada barrio.

Este jueves abrirá sus puertas Marineda City, anunciado a bombo y platillo como "el mayor complejo comercial y de ocio de España y el tercero de Europa" con cifras de impresión. Más de 450 millones de euros le ha costado a la sociedad Invest Cos SA -que encabezan Manuel Jove, José Collazo y José Souto- levantar este inmenso centro comercial de 500.000 metros cuadrados cuajados de hormigón y acero que alberga un hotel de cuatro estrellas, un bloque de oficinas en tres plantas (15.000 metros cuadrados), la mayor bolera de Galicia y el segundo parque de minigolf cubierto de España, con 18 hoyos y de inspiración maya.

Son los inversores los que se interesan por la ciudad, aduce el Gobierno local

Para el pequeño comercio, "el dinero ha dejado de circular por la urbe"

En octubre de 2008 se abrió Dolce Vita, con 62.000 metros cuadrados, y un año después, Espacio Coruña, con 41.000 metros. Mañana lo hará Marineda City, cinco veces más grande que las dos primeras juntas y todo un emporio de grandes marcas. Con la apertura de este nuevo gigante comercial, apostado en el polígono industrial de A Grela y que integra a cadenas del tamaño de Ikea, El Corte Inglés o Decathlon, A Coruña se coloca en los puestos de cabeza entre las ciudades españolas con más metros de superficie comercial por habitante, según el informe de la consultora internacional Jones Lang LaSalle, que en 2010 ya apuntó el despegue comercial de Galicia entre las comunidades que más crecían en superficie bruta alquilable (SBA), con un incremento del 30% hasta 2012, sólo por detrás de Andalucía. La evidente desproporción entre el número de grandes centros comerciales -seis en A Coruña y un outlet en Culleredo que abrirá en mayo- para una urbe con 246.252 habitantes censados no parece preocupar al Gobierno coruñés, pero tiene en pie de guerra a una docena de asociaciones de pequeños comerciantes.

El concejal de Promoción Económica e Comercio, Henrique Tello (BNG), indica que son los inversores los que buscan instalarse en A Coruña porque "consideran que potencialmente es el mejor mercado de Galicia". Admite que su implantación "repercute muy negativamente" sobre el pequeño comercio y los bajos comerciales. "El pez grande se come al pequeño, que queda desamparado", dice Tello, que insta a la Xunta y al Gobierno central a utilizar sus competencias para regular el sector. En el consistorio tampoco prevén grandes problemas de tráfico en la entrada y salida del polígono de A Grela con la Tercera Ronda a medio hacer y, como mínimo, otros dos años de obras.

El vicepresidente de Invest Cos, José Souto Meizoso, señaló que Marineda será "todo un revulsivo económico" para la comunidad y comprometió la creación de 4.500 empleos directos y 8.000 indirectos. El complejo aspira a recibir 15 millones de clientes cada año en "la comarca más rica de Galicia". La comunidad tienen 2,7 millones de habitantes y 249.246 personas en el paro (datos de marzo del 2011), prácticamente el equivalente a toda la población empadronada en la ciudad herculina.

La proliferación de grandes áreas de compras y ocio en el polígono de A Grela también ha dejado obsoletos los centros comerciales de Cuatro Caminos (1987), Los Rosales (1997) y El Puerto (2005), mucho más discretos en tamaño e inversión, y a otros tantos minicentros en Elviña, la plaza de Lugo o el Papagayo. Y los pequeños comerciantes del Obelisco, en la zona centro, el Orzán, la calle Barcelona o A Torre, ven cómo la clientela despeja sus calles y busca cobijo bajo estas macrosuperficies, a salvo de las inclemencias del tiempo. Antonio Amor, presidente de los comerciantes del Obelisco, sostiene que "el dinero ha dejado de circular" por la urbe. Insiste en que este problema "afecta a toda la ciudad" y no solo al centro. Cuenta que son muchos los coruñeses que "emigran" los fines de semana hacia los grandes complejos y que los visitantes que llegan desde el cinturón metropolitano de A Coruña, y otras comarcas próximas -Carballo, Betanzos o Ferrol- quedan a las puertas de una ciudad cada vez más despoblada en horario comercial. Esta asociación del Obelisco agrupa a 200 socios.

"Al propietario le va mal, así que deja de pintar o de arreglar luces y escaparates. Hay un montón de profesionales adheridos al comercio que también se están resintiendo", asegura Amor. Cuenta el caso de algunos compañeros que se "atrevieron" a abrir tienda en los nuevos centros y que, salvo contadas excepciones, agonizan bajo el monopolio de las grandes cadenas. "Ni crecemos en vecinos ni son un reclamo turístico extra", se queja. Desde su entidad reprochan al Gobierno local que favorezca "los grandes pelotazos" de los macrocentros por encima "de la constancia de los pequeños".

Ajena a la polémica, a dos días de su inauguración, Marineda se promociona en todos los soportes publicitarios con una "campaña masiva" personalizada en los rostros gallegos de Julia Otero, Manuel Manquiña y María Castro. La empresa que gestiona el recinto, la consultoría internacional CB Richard Ellis, sostiene que ya ha comercializado el 94% de los 197.000 metros cuadrados que destina a locales y comercios con 118 firmas nacionales e internacionales, ocho de ellas de Inditex. Además, integra en el complejo a El Corte Inglés, con su Hipercor, asentados en 45.000 metros cuadrados, junto una pista de hielo, 12 salas de cine y otros 7.000 metros dedicados a bares y restaurantes de comida rápida o temáticos.

En la construcción de esta "nueva ciudad del ocio" para toda Galicia han trabajado más de 3.000 personas durante los últimos 28 meses que manejaron "en tiempo récord" más de 1.600 zapatas de hormigón y 15 millones de kilos de acero. Los promotores no han escatimados lujos ni metros para Marineda, coronada con una cúpula acristalada de "vidrio en bóveda" de 3.500 metros cuadrados y una plaza peatonal exterior de 14.000 metros cuadrados y adornada con una mastodóntica escultura de siete metros de Francisco Leiro.