‘Bous a la mar’: los toros no deberían nadar

Coincidiendo con las fiestas de la Santísima Sangre, cada año se celebra en Dénia (Alicante) desde principios de julio los festejos taurinos conocidos como ‘bous a la mar’ (‘toros a la mar’), de los que puede verse un resumen pormenorizado en el vídeo que acompaña esta noticia. Estas fiestas populares se celebran desde el siglo XVII y, en todo este tiempo, pocos detalles han cambiado de lo que allí sucede. Durante ocho días, y dos veces por jornada, toros y vacas corren en un encierro que desemboca en una plaza. Pero este no es el destino final: el objetivo es que estos animales caigan al agua. “La característica principal de esta plaza es que está abierta al mar, por lo que los toros y las vacas que participan siempre acaban cayendo al agua”, asegura Aïda Gascón, directora de AnimaNaturalis de España, que añade que “el agua no es el medio natural del toro”. “Nadan como pueden, intentando desesperadamente encontrar un lugar de apoyo ”, comenta sobre los festejos, que finalizan precisamente este fin de semana.

Aunque lo habitual es que en estas fiestas los toros y vacas que participan no mueran y regresen de nuevo a las ganaderías, “para continuar de pueblo en pueblo durante las fiestas de verano”, la realidad es que debido al estrés que sufren, en alguna ocasión estos animales han muerto de infartos o incluso ahogados.

En el vídeo que acompaña a esta noticia Gascón explica en qué consisten estas fiestas populares, cómo es el encierro, cuántos toros se utilizan, quiénes son los principales asistentes de los ‘toros a la mar’, qué les espera a estos animales una vez que se acaben las fiestas y cómo podrían regularse este tipo de festividades.