Vídeo | La familia del soldado ucranio Kylik Sergii logra enterrarlo 11 días después de su muerte

Starychi, un pequeño pueblo al oeste de Ucrania, ha conseguido enterrar por fin este martes a Kylik Sergii, un hombre de 54 años que acudió al frente muchos años después de cumplir con el servicio militar obligatorio. Murió el pasado 3 de marzo de un tiro en el cuello en uno de los ataques que sufrió la localidad de Bucha, al oeste de Kiev, pero las malas comunicaciones han hecho que el cuerpo haya tardado 11 días en regresar a su ciudad natal. Como se puede ver en el vídeo que acompaña esta noticia, allí le esperaba un funeral popular, con música y una caravana de acompañamiento al estilo de una procesión.

La localidad en la que ha tenido lugar el entierro está a escasos 20 kilómetros de la frontera con Polonia, y a otros tantos de la base militar de Yavoriv, bombardeada este mismo domingo por el Ejército ruso. El gobernador de la región de Lviv (Leópolis, en español) señaló entonces que el ataque había causado al menos 35 muertos y 134 heridos. El cuerpo ha llegado primero, en una bolsa de plástico negro dentro de una furgoneta, al hospital de Novoiavorivsk, donde se ha comprobado toda la documentación. De ahí ha partido, ya en el féretro, rumbo al cementerio de la población vecina. Ha sido la única persona enterrada allí este día, según relata el enviado especial de EL PAÍS Luis de Vega.

La localidad de Bucha, donde murió Sergii, junto con la de Irpin, es una de las dos ciudades satélite de Kiev en las que se han enfrentado con más dureza Rusia y Ucrania desde el inicio de la guerra. Para el Kremlin son localidades clave, pues constituyen la puerta de entrada a la capital. A la espera del avance en las negociaciones entre ambos países, los ataques continúan su escalada.

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