La empresa que permite actualizar el CRM con la voz en segundos

“¿Conocéis a alguien que disfrute rellenando el CRM?“. Esa pregunta fue el detonante que llevó a Daniel, Carlos y Diego a fundar Labia. Un vendedor promedio realiza siete u ocho reuniones diarias y, al terminar la jornada, dedica entre una y dos horas a escribir lo ocurrido.

“Tras implantar cientos de CRMs desde la consultora Pymext, comprobamos que hasta el 75% del tiempo de un comercial se va en tareas que no son vender”, recuerda el CEO Daniel. Labia es como tener un secretario en el bolsillo. Al salir de la visita, el comercial dicta: “Crea el contacto Juan Pérez, agenda reunión para el martes a las doce, genera oportunidad de treinta mil euros y envía la propuesta por correo”.

En menos de un minuto el sistema ha creado el contacto, la cita, la oportunidad y el email, sin que el usuario teclee una sola palabra. “Con solo pulsar un botón, el CRM se actualiza solo”, subraya Daniel durante la demostración. La clave no es solo la transcripción; el motor de Labia interpreta la intención y ejecuta acciones reales en cualquier CRM. El impacto es medible: cada comercial ahorra más de veinte horas al mes, casi una hora diaria que ahora dedica a vender.

Los directores también celebran el cambio: al dictar la información mientras está fresca, los equipos registran hasta cuatro veces más datos de calidad, lo que se traduce en mejores decisiones y previsiones de venta. Al devolver literalmente la voz a los vendedores, Labia demuestra que la tecnología puede liberar el potencial humano en ventas: que los buenos comerciales vendan hablando y, por fin, que el CRM escuche.