No quiero una vida de oficina de ocho a tres" La madrileña Marta Santacana, de 33 años, es lo más parecido a una transformista laboral. Estudió Administración y Dirección de Empresas, "que vale para todo". A los 26 años la nombraron subdirectora de una sucursal de La Caixa. "Al mes lo dejé. Por aburrimiento. No quiero una vida de oficina de ocho a tres". Desde entonces ha encadenado todo -todo- tipo de trabajos: masajista, dependienta, camarera, azafata de tierra, contable, organizadora de eventos... A principios de año cambió de nuevo. "El trabajo me gustaba, pero después de tres años no veía ninguna perspectiva de progreso", relata. Su futuro, cree, está ahora en su proyecto de ropa y complementos infantiles que vende en la web martasantacana.com. Empezó "porque no sabía qué regalar al hijo de una amiga" y espera que de aquí a cinco años sea su medio de vida.JAMES RAJOTTE"En mi familia he visto a emprendedores caerse y levantarse" Ella no es la primera emprendedora de su familia, ni será la última. "Los he visto caerse y levantarse, creo que sé a qué me expongo". Esta arquitecta de 33 años, formada entre Madrid, Nueva York y Londres, decidió dejar la seguridad de un buen empleo en Reino Unido para precipitarse a la incertidumbre: invertir sus ahorros en un estudio propio en España, Studio Ibu (www.studioibu.com), que se materializó en julio de 2010. De su vida anterior solo echa de menos la escala de los proyectos. "Antes hacía trabajos para el metro de Nueva York o para un complejo histórico en Lituania... Y ya se sabe que en España ahora no se pone un ladrillo".JAMES RAJOTTE"Es inevitable no sentir un cierto desamparo"Todavía no ha cumplido un año como autónomo y solo tiene un pesar: "No haberme lanzado antes". Diego Mellado, de 27 años, cambió un trabajo de ingeniero de telecomunicaciones en una multinacional por otro de "asistencia técnica a artistas multimedia". Duerme menos, trabaja más y nunca se separa de su iPhone, pero está "mucho más satisfecho". Hay alguna que otra pega, por supuesto. "Ya no basta con aceptar el borrador de la declaración de la renta... Y es inevitable no sentir un cierto desamparo". Pero ya solo se imagina su futuro en clave emprendedora. "Me gusta la idea de formar una consultora para artistas con profesionales de distintos perfiles".JAMES RAJOTTE"Es muy gratificante crear empleo para ti y para los demás" Primera conversación. Elvia Mesqui, de 36 años, asegura: "Quizá más adelante abra más tiendas; ahora lo que me frena no es la crisis, sino la maternidad". Segunda conversación: "Voy a abrir un negocio de ropa infantil con una amiga". Intervalo: dos meses. "Nunca me había planteado emprender, pero es muy gratificante crear empleo para ti y para los demás", justifica. Tras recorrerse el mundo de paddock en paddock, la escudería para la que trabajaba cerró en plena temporada 2009. Ella retomó una colaboración con Ducati -que mantiene-, pero quería ser madre y vivir en Cádiz, así que necesitaba un plan. Capitalizó su prestación por desempleo y con 20.000 euros montó El Cofre Encantado, una tienda de bisutería y complementos. "A los siete meses había recuperado la inversión".JAMES RAJOTTE"Esperamos que no sea la última empresa que fundamos juntos"Era cuestión de tiempo que estos ilicitanos en la treintena se decidiesen a montar una empresa. "Habíamos hablado de un outlet de zapatos, una web de parafarmacia...", explica Teruel. La que salió adelante fue Movildinero.es, en marcha desde el pasado mayo y dedicada al reciclaje de móviles. Fue él, que trabaja en el sector, quien convenció a Pico, abogado, y Pedrajas, farmacéutico. ¿Su fórmula? Ahorros y las tres F: friends, family and fools (amigos, familia y locos). "Un amigo periodista nos ayudó con la nota de prensa, otro con el diseño gráfico, mi cuñado se ocupa del posicionamiento", reconoce Pico. El balance de estos primeros meses es positivo y aspiran a dar el salto a la internacionalización en 2012. "Esperamos que no sea la última empresa que fundamos juntos".JAMES RAJOTTE"No tengo plan B, así que tengo que jugármelo todo por la música""Nunca he tenido plan B. No me imagino mi vida de otra forma, así que no veo otra alternativa: tengo que jugármelo todo por la música". Tras más de una década de vaivenes en la industria, Belén Arjona, cantante, de 30 años, por fin está haciendo lo que le "da la gana". Acaba de estrenar banda, Bel and the Boy (www.belandtheboy.com) -junto a John Lanigan-, y disco, We belong here, que sale a la venta a finales de septiembre, cuando se despedirán de los escenarios españoles. "Nos mudamos a Londres. Seguiremos viniendo a tocar, pero queremos probar suerte en un mercado más potente", explica. "Es un salto que me da respeto, es empezar de cero, pero la música me ha dado todo lo que tengo, así que no veo razones para ser totalmente pesimista".JAMES RAJOTTE
