Iceta apuesta por la unidad con dos vicarios generales

El obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha elegido ya a quienes conformarán su equipo de gobierno en los próximos años. El prelado ha optado por la fórmula de nombrar a dos vicarios generales, en vez de uno como hasta ahora, en una decisión que se interpreta como un gesto hacia el entendimiento entre las distintas sensibilidades que conviven en la Iglesia local. El actual número dos de la diócesis, Ángel Mari Unzueta, repetirá en un cargo que en adelante deberá compartir con Félix Alonso. El primero se encargará de la labor pastoral, mientras que el segundo se responsabilizará de la curia, dada su mayor experiencia jurídica.

No es baladí la decisión del obispo en favor de la pacificación interna de la comunidad. El amplio sector crítico, que interpretó la consagración de Iceta en clave de "involución", se mantenía a la espera de que este nombrara a sus hombres de confianza para definir la labor de oposición. El prelado, sin embargo, ha cumplido su promesa de respetar la voluntad de la comunidad y se ha decantado por dos de los tres candidatos que más votos habían obtenido en las dos rondas de consultas previas. Un gesto que han recibido con agrado los contestatarios.

Unzueta era el preferido por los feligreses. Aunque de tendencia progresista, Iceta ha valorado su fidelidad durante los meses de gestión que han compartido, pese a las diferencias de criterio en algunos aspectos, y su posible papel articulador de las distintas corrientes que conviven en la Iglesia local. Alonso era nuevo en las quinielas, pero se convirtió en el tercer candidato con más apoyos entre las bases. Se ubica en el círculo de confianza del obispo y responde a un perfil más conservador, aunque abierto al entendimiento.

El nombramiento de los dos vicarios generales se completa con el de los cuatro territoriales que completarán, junto al prelado, el Consejo Episcopal que asumirá el gobierno de la diócesis. Todos ellos se enmarcan en el denominado sector progresista. En Uribe Kosta continuará al frente Félix Larrondo, mientras que en las Encartaciones hará lo propio Kerman López. Este último optaba también a una de las vicarías generales, pero Iceta se ha decantado por mantenerle en una comarca donde ha recabado un apoyo casi unánime de las bases. En Bilbao tomará el relevo Antón Rey, un joven con experiencia en misiones que se ubica en la línea crítica y aperturista. Por último, José Agustín Maiz, del sector crítico, asumirá la gestión en la zona de Gernika y el Duranguesado.

Iceta agradeció la colaboración de quienes han decidido aceptar los cargos y anunció que en breve se conformarán también el Consejo de Presbiterio y el Pastoral Diocesano.