"Mi madre nos hablaba de los lobos como si fueran nuestros hermanos. Mis padres de hecho los criaron antes que a nosotras y aprendieron muchas cosas que luego aplicaron a nuestra crianza. Siempre presentes en las conversaciones familiares. El lobo: símbolo de libertad indómita. Compañero de viaje tan parecido al hombre...". / ODILE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE"Nosotras éramos su pequeña tribu de mujeres. Tantos recuerdos. Cómo nos contaba las cosas, sus vivencias, sus sensaciones. El me hizo apasionarme por la vida, querer descubrir todo lo que estuviera a mí alcance, vivir plenamente y disfrutar de la infinidad de misterios y sensaciones que cada día esperan ser vividos". / ODILE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE"Nunca sentí miedo a su lado. Sólo quería aventurarme en lo desconocido de su mano. El siempre me protegía y creo que lo sigue haciendo"./ ODILE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE"Pocos meses antes de perder la vida. Mira al horizonte pensativo. Tanto por hacer. Tantos mensajes que trasladar. Todo al servicio de la vida, de lo que tanto le apasionaba, de lo que el percibía y sentía como la más importante misión: contagiar a sus congéneres de su pasión por la vida". / ODILE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE"Los niños de hoy aún se enganchan cuando ven a mi padre explicarles su naturaleza. Una herramienta sin parangón para sensibilizar hoy y mañana a las nuevas generaciones". / ODILE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE
