10 fotos10 pantalones cómodos para estar por casa (que no son ni de pijama ni de chándal)Porque la comodidad no está reñida con vestir bien y estas prendas lo demuestran.Marta Martínez30 mar 2020 - 01:59CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceEl pantalón palazzo. Este pantalón que hoy es un indispensable de nuestro armario, fue creado en 1932 por Jean Patou y bautizado como 'pantalón Formentor' en homenaje a este prestigioso hotel menorquín. Las mujeres de la época como Coco Chanel o Marlene Dietrich lo adoptaron al momento por su carácter vanguardista y por permitir libertad de movimiento sin renunciar a la sofisticación. Los mismos motivos por los que puede convertirse en tu mejor aliado para estos días en casa. El de la imagen es de Uterqüe (119 euros).La falda pantalón. Celine se ha hartado de advertirnos: la falda pantalón ha vuelto. Y si antes teníamos nuestras dudas sobre su uso, ahora se te quitarán todas de golpe. Principalmente por su gran comodidad. Tiene todo lo bueno de un pantalón (puedes sentarte como te dé la gana), y todo lo bueno de una falda (es amplia y no tiene costuras que amenacen nuestra circulación). Otra de las claves de su éxito es su versatilidad. Es perfecta para llevarla con un jersey de punto fino, con una camisa o, en su versión más setentera, con un polo de manga larga, otra de las sensaciones de la temporada. En la imagen, falda pantalón de Cos con elástico en la cinturilla (69 euros).De cuero. Sí, de cuero, has leído bien. El día que estés aburrida del punto, el lino o cualquier otro tejido corriente, apuesta por el material de la temporada: el cuero. Este es de corte recto y de cintura baja, como la que fue tendencia en los 90. Su anchura contrarrestará algunos de sus inconvenientes como la posible falta de transpiración. Quizá no sea una de esas prendas que te pondrás cuatro días seguidos, pero desde luego es el pantalón perfecto para salir de la rutina de vez en cuando. El de la foto es de Zara (119 euros).De punto. Elástico y ancho. Podría pasar por un pijama y ahí está el secreto de su éxito. Esta es una de esas prendas que abraza el estilo ‘cozy’ al tiempo que no pierde de vista el toque ejecutivo que lo convierte en apto para pisar el asfalto (cuando se pueda). El punto de canalé le da un extra de actualidad que hará de este pantalón tu mejor aliado del confinamiento pero, también del día que acabe y puedas lucirlo allá donde te lleve tu agenda. Este de aquí es de le17septembre (c.p.v).El pantalón bombacho. En la década de los 2000, con el movimiento ‘New Age’ y su estética vimos cómo el conocido como pantalón 'harén' cruzaba la frontera que lo limitaba a las incondicionales del estilo hippy y se instalaba en el armario de casi todas. Este tipo de pantalón ha vuelto este verano en todo su esplendor. Hace unas temporadas lo hizo de forma tímida gracias a los pantalones baggy, es decir con la misma estructura de tiro bajo pero sin los elásticos en los tobillos, y ahora vuelve en toda su esencia. Es la mejor opción para pasar del teletrabajo al directo de Yoga de tu instructor favorito sin necesidad de cambiarte. Este es de Massimo Dutti (89,95 euros).De traje pero con truco. Quizá llegados a este punto hasta eches de menos tus trajes de chaqueta y pantalón. Lo que antes te parecía lo más tedioso de ir a la oficina, es ahora lo que más te apetece. Buenas noticias. Puedes recuperar tus looks de ejecutiva sin renunciar a la comodidad con estos pantalones que aúnan lo mejor de lo formal con lo mejor de las prendas deportivas: la cinturilla elástica. Eso sí, una vez que los pruebes, no querrás ponerte otros. El de aquí es de Bimba y Lola (115 euros). El pantalón de raso. Si creías que este confinamiento había acabado con tus opciones de lucir uno de los materiales de la temporada demostrando que tú también puedes emular a Jennifer Aniston, estás muy equivocada. Existen los pantalones que contienen todos los requisitos para vestir de raso en época de cuarentena: máxima confortabilidad, gracias a su silueta ancha XL, y la despreocupación total por la plancha. Es uno de los grandes inconvenientes del satén que se acaban de un plumazo gracias a este acabado de efecto arrugado. Porque ahora también es el momento de recuperar aquella máxima de “la arruga es bella”. Pantalón arrugado de Sfera (29,99 euros).El pantalón del sábado noche. Hay quien dice que tiene mucha más vida social ahora que antes del confinamiento. La agenda de videollamadas ocupa todas tus tardes y los fines de semana siguen siendo sagrados para compartir con tus amigos. Aprovecha para cambiar de look y apostar por algo más festivo. Un género que también se adapta a la nueva fórmula de quedada virtual sin moverse del sofá gracias a estos pantalones de estilo deportivo adornados, eso sí, con una buena dosis de pedrería. Un conjunto con el que puedes despertar tranquilamente al día siguiente si la cosa se alarga. Este es de Uterqüe (99 euros). El famoso slouchy. Ha llegado el momento. Si eras de las que renegaba de este tipo de pantalón puede que sea la hora de reconciliarte con él y abrazar la tendencia. Su diseño ancho en la parte superior que se va estrechando a lo largo de la pierna lo convierte en uno de los más aptos para pasar este confinamiento cómoda pero estilosa. Acabarás la cuarentena dominando la prenda de la temporada. El modelo de la imagen es de Zara (29,95 euros)De punto calado. Si la cosa se alarga y llega el buen tiempo, esta puede ser una solución para vestirte a pesar de todo. Después siempre podrás aprovecharlos para el verano y el día en el que podamos ir a la playa. Este tejido calado confeccionado a base de ganchillo, alcanzó su máxima popularidad en la década de los 60. Si buscas un referente, fíjate en Jane Birkin y aquel vestido que eligió para una noche de fiesta o en la Cher de la época y aquellos minivestidos de entonces. Son perfectos para darle a tu look casero un toque bohemio. Combínalos con una sencilla camiseta blanca o con una camisa anudada y sueña con que el verano se acerca mientras aprovechas ese rayo de sol que se cuela por tu ventana, terraza o patio. Este de aquí es de Mango (35,99 euros).