Los lazos (en la espalda) son la gran tendencia de este año. Nicole Kidman lo lució en el pelo, Julianne Moore y Dakota Fanning como perfecto adorno en el photocall y Penélope Cruz como colofón a su Ralph & Russo. Aunque los lazos fueron los grandes protagonistas en todo tipo de versiones, los más espectaculares los descubrimos cuando las celebrities posaron de espaldas.Los accesorios en el pelo son imprescindibles. Las horquillas colocadas a ambos de la cabeza son una de las grandes tendencias capilares del momento. Así lo demostró Caitriona Balfe con una versión inspiradora y fácil de copiar. Joanna Newsom, por su parte, apostó por un pasador-joya de aires retro que convirtió su melena en una de las más originales de la noche.El escote corazón manda. Emmy Rossum, Dakota Fanning, Amber Heard, Heidi Klum, Ella Stiller, Elisabeth Moss... la lista de actrices que lo apostaron todo a este tipo de escote lo convierte en el favorito de la noche y en una de las tendencias del momento.Cintas, pulseras y pines para reivindicar el #MeToo. Si bien el año pasado las actrices vistieron de negro como símbolo de protesta ante los abusos sexuales en Hollywood, esta edición los asistentes han llevado cintas colgando en sus bolsos o a modo de pulsera en las que podría leerse Time's Up, asociación que lucha por acabar con el acoso sexual y lo combate legalmente.Blanco y negro siempre es una buena idea. Amberd Heard (de Monique Lhuillier), Rachel Weisz (con diseño de Celine) y Charlize Theron (perfecta de Dior) demostraron que no hace falta complicarse para brillar en la alfombra roja. Lejos de arriesgar con colores estridentes, las tres apostaron por el binomio más eterno y elegante.Las gafas también son para los grandes eventos. Emily Blunt, Patricia Arquette y Lupita Nyong'o entregaron y recogeron premios con las gafas puestas. El históricamente denostado accesorio se cuela así en la gala, pero no en la alfombra roja. ¿Veremos celebrities posando con sus lentes próximamente?Las sombras son las protagonistas del maquillaje. Las actrices dejaron a un lado los labios rojos o los tonos burdeos que tanto se vieron en otras ocasiones apostando por maquillajes bastante naturales y labiales rosados. Camilla Belle y Lucy Boynton acertaron potenciando su mirada con dos de las sombras más llamativas y originales de la noche.El tul ya no es para princesas. El Dior de Kiki Layne, el 'sujetador' al aire de Alison Brie o el corpiño del diseño que lució Constance Wu demuestran que el tul no tiene por qué ser ñoño o excesivamente aburrido. Y también que es una de las grandes tendencias de esta edición: Jodie Comer, Emmy Rossum o Lili Reinhart también se atrevieron con él en versiones más o menos edulcoradas.El animal print también llega a la alfombra roja. En un evento en el que los estampados suelen quedar en segundo plano y las tendencias masivas se desechan en favor de diseños exclusivos con vocación atemporal, Anne Hathaway arriesgó con un vestido de leopardo firmado por Elie Saab. Lo completó con pendientes XL como manda otra de las reglas de las últimas colecciones.Se puede ir más allá del típico vestido. Aunque no siempre con acierto. Elisabeth Moss, protagonista de El Cuento de la Criada, arriesgó con un minivestido de Dior que no pasará a la historia. Julia Roberts, que ya había acudido en pantalón en la edición de 1990, se decantó por un diseño de Stella McCartney.Kate Mara y Lady Gaga o las cabelleras más arriesgadas. La primera se marcó un recogido al más puro estilo Rey en Star Wars. La segunda, sorprendió con un tono de pelo a juego con su espectacular vestido de Valentino (un guiño al que llevó Judy Garland en 1954). Sin duda, los dos peinados más divertidos de una edición que optó por los moños delicados o melenas sueltas y naturales como grandes apuestas.Monique Lhuillier es la nueva Marchesa. La diseñadora vistió a siete celebrities tomando el relevo a la firma capitaneada por Georgina Chapman, mujer de Harvey Weinstein, que esta edición y tras el escándalo sexual protagonizado por su marido no ha vestido a ninguna de las asistentes.
