8 fotos
Del cero al «Terelu»: la impactante evolución de Florence Pugh tras raparse el pelo La actriz, que apareció en el estreno de Oppenheimer con un cabello que recordaba a una llamarada, ha aportado por un estilo capilar indomable que nace de un momento irrepetible de la Gala del MET. Este año la gala del MET, el acontecimiento de moda más importante de la industria del entretenimiento, planteaba un reto complicado a sus invitadas: homenajear a Karl Lagerfeld, histórico director creativo de Chanel, sin ir vestidas de Chanel y hacerlo además, combinando elegancia y audacia. Muchas no lo consiguieron: la gala de este año fue particularmente grotesca, con celebridades vestidas con gatos animatrónicos (como fue el caso de Jared Leto) o caracterizadas mediante el maquillajes histriónicos (como fue el caso de Doja Cat). La protagonista de 'Midsommar' y estrella de 'Oppenheimer', Florence Pugh, consiguió sin embargo la elegancia requerida, gracias al vestido blanco y negro que le diseñó Pier Paolo Piccioli, director creativo de Valentino, firma de la que es embajadora; la dosis de audacia la logró con el peinado: Pugh se rapó el pelo al cero para que en su cabeza solo destacase el impresionante tocado de plumas que habían creado específicamente para ella. Funcionó: su penacho negro combinado con ese peinado marcial fueron detalles muy comentados de la jornada. Raymond Hall (GC Images) Pero como bien sabe cualquiera que haya pasado por un proceso de pérdida temporal del cabello o que haya realizado un rapado drástico sobre una melena, la fase de crecimiento posterior es complicada: el cabello, ni suficientemente corto como para poder ignorarlo, ni suficientemente largo como para poder peinarlo se comporta como quiere. Marc Piasecki (WireImage) Eso es exactamente lo que le ha pasado a Pugh con pelo post-MET, como pudimos comprobar en su primera aparición desde aquella gala, hace dos semanas en el desfile de alta costura de Valentino que tuvo lugar en el Chateau de Chantilly. Y dado que un corte como ese hace que las posibilidades de estilismo peluquero sean limitadas la actriz ha optado por una de las pocas opciones a su disposición: teñirse el pelo. Marc Piasecki (WireImage) La actriz, que siempre hace apuesta supuestamente osadas que defiende con total convicción, ha conseguido ganar la "guerra de los pezones" que inició el año pasado, cuando se presentó en este mismo desfile con un vestido que dejaba ver la aureola de sus pechos. Se generó un escándalo tan monumental, sobre todo en redes sociales, que se vio obligada emitir un comunicado defendiendo su derecho a mostrar su cuerpo. Este año ya no ha habido escándalo. Jacopo Raule (Getty Images) Si bien el color del tinte elegido no suscitó comentarios durante el desfile de Valentino sí que lo hizo en su siguiente acto público: el photocall de Oppenheimer en Londres. A este evento, el más importante el año para ella, quizá, acudió con un espectacular traje vaquero vintage de Moschino Jeans. Gareth Cattermole (Gareth Cattermole/Getty Images) Oppenheimer, el biopic del físico nuclear responsable del Proyecto Manhattan, está llamada a ser uno de los grandes blockbusters del año, junto con su principal competidora, la película sobre Barbie dirigida por Greta Gerwig. El color del cabello de Pugh fue interpretado como un guiño a Gerwig y a la muñeca más famosa de todos los tiempos pero también como un troleo al director. Neil P. Mockford (Getty Images for Universal Pictu) Más tarde, sin embargo, al estreno que tuvo lugar el día siguiente también en Londres acudió vestida de lo esperable, Valentino. El rosa de su cabeza había desaparecido: ahora el tinte era un naranja que evolucinaba a amarillo por los lados y que parecía una evocación clara del fuego abrasador que tiene un inevitable protagonismo en una película que gira en torno a la invención de la primera bomba nuclear. Karwai Tang (WireImage) Muchas mujeres que prueban el pelo rapado o ultracorto no regresan nunca al pelo largo porque descubren que a pesar de los límites estilísticos que pueda tener su comodidad es imbatible. Fue el caso, por ejemplo, de Terelu Campos, quien en 2012 padeció un cáncer cuyo tratamiento le hizo perder el cabello y le obligó a un cambio en su estética capilar que al final se acabó apropiando. Aunque por circunstancias más afortunadas y festivas, Pugh ha encontrado una nueva forma de expresión en este tipo de cabellera. Habrá que ver cómo evoluciona. Anadolu Agency (Anadolu Agency via Getty Images)