El testigo al que Sergio Morate confesó su crimen no se presenta en el juicio
El único acusado de asesinar a las dos chicas de Cuenca, Marina y Laura, se libra (de momento) de una declaración clave
Sergio Morate, el único acusado por el doble crimen de Marina Okarynska (26 años) y Laura del Hoyo (24) en el verano de 2015 en Cuenca, se ha librado de uno de los testimonios clave en el juicio que esta semana se celebra en la Audiencia Provincial de Cuenca. Istvan Horvath, el amigo que le acogió en Rumanía, adonde huyó al día siguiente de la desaparición de las dos jóvenes, no ha comparecido a su cita en el juzgado de la provincia rumana de Timisoara, donde tiene su residencia, junto con su hermano, su mujer y el hijo de pocos meses de ambos. Morate fue detenido el día 12 de agosto en ese piso de la localidad de Lugoj donde, según la declaración que le tomaron posteriormente a su amigo rumano, le confesó que había matado a su exnovia Marina y a Laura, su amiga.
El testimonio de Horvath, a quien conoció durante el año que pasó en la prisión de Cuenca por haber retenido a otra exnovia contra su voluntad, era clave por ese motivo, ya que es la única persona a la que supuestamente le confesó sus crímenes. "No derramó ni una lágrima", contó Horvath en su declaración.
Ninguno de esos tres adultos se ha presentado este martes en el juicio. En concreto, Istvan Horvath ha alegado que se encontraba trabajando en Alemania. Su mujer ha dicho que no podía ausentarse porque tenía que cuidar a su hijo y no tenía con quien dejarlo. Y el hermano está en paradero desconocido.
El presidente de la sala ha solicitado que fuesen localizados por las fuerzas y cuerpos de seguridad rumanos para poder tomarles declaración en días venideros.
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