PP, PSOE y Podemos se oponen a la ley de gestación subrogada de Ciudadanos
Los dos partidos mayoritarios rechazan la "mercantilización" de las mujeres que, según consideran, supone esta práctica
La proposición de ley que Ciudadanos ha registrado este martes en el Congreso para regular la gestación subrogada no saldrá previsiblemente adelante por falta de apoyos. La iniciativa no cuenta con el respaldo de los dos partidos mayoritarios, PSOE y PP y Podemos se opone con matices.
El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha asegurado que su grupo parlamentario es "absolutamente contrario a que se pueda usar de forma mercantil el vientre de una mujer" aunque ha añadido que estudiarán la iniciativa de Ciudadanos,a la que le queda un largo trámite parlamentario hasta su debate, que no será al menos hasta septiembre. "Estamos rotundamente en contra de la mercantilización de la maternidad por parte de nadie", ha insistido a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la junta de portavoces en el Congreso.
El PSOE acordó una postura de rechazo en su último Congreso Federal, celebrado a mediados de junio. “Los vientres de alquiler suponen una mercantilización de las mujeres”, recoge el texto acordado por los socialistas. “El PSOE no puede abrazar ninguna práctica que prevea soca bar los derechos de las mujeres”. "Para nosotros es un tema zanjado", ha señalado este martes José Luis Ábalos, secretario de organización del PSOE.
Podemos, por su parte, aún no ha cerrado su debate sobre este asunto aunque la formación señala que estará "en contra en la media en la que implique vulneración de derechos humanos para la gestante o los menores", según un portavoz. Aunque estudiarán "en profundidad" la propuesta del aprtido de Albert Rivera, la diputada Sofía Castañón considera ya que Ciudadanos "enmarca su argumentación en una interpretación sesgada de la libertad y los derechos individuales que no tiene en cuenta a la madre gestante sino el deseo satisfecho, previo pago, de los comitentes".
"Cuando hablamos de gestación, no hablamos de una técnica reproductiva, hablamos de los cuerpos y los derechos de las mujeres, que son para Podemos innegociables. Esta ley elude precisamente muchas de las cuestiones que ha puesto sobre la mesa el movimiento feminista", según Castañón, que también es responsable de feminismos de Podemos. "Un requisito básico para garantizar los derechos de las mujeres es dialogar, desde el sosiego político, con los movimientos feministas. Sabemos que Cs se ha reunido con empresas, pero ¿ha entablado alguna conversación con colectivos feministas? ¿Cómo va a garantizar así los derechos de las mujeres?".
El partido de Iglesias considera que no se puede decir que sea una propuesta "altruista", como defiende Ciudadanos, "cuando hay de por medio compensaciones económicas" como las previstas en este caso, una compensación "resarcitoria" para las gestantes. Castañón también acusa a la formación de Rivera de ignorar "los dictámenes de organizaciones internacionales contrarias a esta práctica, el hecho de que maternidad y paternidad no sean, en grado alguno derechos ni, desde luego, la gestación por sustitución una demanda social mayoritaria en el país, tal como pretende hacer creer el señor Rivera".
La propuesta del partido de Albert Rivera limita la condición de gestante a mujeres que hayan cumplido los 25 años; ya hayan sido madres con anterioridad; sean españolas o residentes legales en España; y tengan una situación socioeconómica estable. Una mujer solo podría ser gestante por subrogación en un máximo de dos ocasiones.
"Es un contrato abusivo"
“Llama la atención la falta de condiciones que hay para los promotores frente a las muchas limitaciones que se ponen a las mujeres, para las que han fijado condiciones leoninas”, señala Alicia Miyares, de la asociación No Somos Vasijas, contraria a la regulación de esta práctica y que promovió con otros 50 colectivos una campaña contra la celebración de una feria de gestación subrogada en Madrid.
La propuesta de Ciudadanos establece que los subrogantes deben tener entre 25 y 45 años, nacionalidad española o residencia y, en caso de que sea una pareja debe ser matrimonio o relación equivalente reconocida por la ley (en cuyo caso, uno de los dos deberá cumplir el criterio de edad y nacionalidad).“Esa diferencia es justo lo que revela que estamos ante un contrato abusivo”, añade la portavoz de No Somos Vasijas. “¿No hay pruebas físicas y psicológicas para ellos? ¿Cuáles son los criterios para considerar idóneos a los padres? ¿Solo el hecho de que quieran tener hijos? ¿No hay limitaciones en el número de hijos que podrá tener sirviéndose de un vientre de alquiler?”, ha añadido Miyares, que asegura también que la formación de Rivera no se ha dirigido a su asociación. "Ciudadanos ha tomado una posición favorable sin oír argumentos en contra".
A favor de la propuesta
En el lado opuesto, el vicepresidente y fundador de la asociación Son Nuestros Hijos, Antonio Vila-Coro, respalda la proposición porque recoge el "modelo altruista" que defienden desde este colectivo, aunque proponen que sea compatible con una compensación económica como ocurre con los donantes de gametos, esperma y óvulos. También reclaman que no haya límite de edad para los padres subrogantes; o que se pueda realizar entre familiares, entre otros cambios.
"A grandes líneas, la proposición recoge el modelo de regulación que nosotros proponemos”, ha señalado Vila-Coro en declaraciones a la agencia Europa Press. “Ahora bien, hay cosas muy concretas en las que no estamos plenamente de acuerdo, que podrían ser cambiadas, no son líneas rojas, son matices”. La asociación no comparte que se prohíba la consanguineidad entre las parejas que optan a la subrogación y la mujer gestante. "No debería ser obligatorio, como pasa en algunos países, pero eso no significa que se prohíba", ha subrayado.
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